El Centro de Iniciativas para la Cooperación (CIC) Batá y la Asociación Pro Inmigrantes de Córdoba (APIC), que forma parte de la federación regional Andalucía Acoge, presentaron ayer el centro de estudios interculturales La Aldaba, un proyecto de desarrollo conjunto de actividades relacionadas con la investigación, formación de agentes sociales, eventos culturales o manifestaciones artísticas como exposiciones, ciclos de cine o teatro. La iniciativa, cuya filosofía se basa en el conocimiento y el respeto del otro, la aceptación de las diferencias como una consecuencia lógica de la historia y el uso del diálogo para la resolución de conflictos, se inaugurará esta tarde en Caballerizas Reales con el Festival de Música Intercultural, que organiza APIC dentro de los actos de celebración de su décimo aniversario.

El presidente de esta entidad, David Pardo, explicó que este centro, aún sin sede a la espera que concluyan las negociaciones que ambas entidades mantienen con el Ayuntamiento para la cesión de espacios, tiene como objetivo "aunar esfuerzos entre las dos asociaciones para dar una idea de la inmigración distinta a la que tienen los gobiernos, que asocian el fenómeno con la delincuencia, el crimen y otros problemas. Nosotros, en cambio, creemos que se trata de un aprovechamiento de riqueza en muchos sentidos, especialmente el cultural". Por su parte, el presidente de CIC-Batá, Rafael Cantero, resumió esta idea con el lema Otra política de inmigración es posible.

Ambos responsables coincidieron en la necesidad de desarrollar actividades de cooperación con otros organismos y entidades del ámbito andaluz, e informaron de los detalles de un programa cultural sobre el patrimonio histórico, artístico y monumental cordobés como reflejo de la confluencia de diferentes culturas, proyecto que presentarán ante la Unión Europea y que cuenta con el apoyo institucional del Ayuntamiento, la Diputación y la Junta.