Cubrir una necesidad básica de muchas personas gracias a la solidaridad de los ciudadanos. Es el objetivo que persigue el mercadillo de ropa que organiza desde hace cuatro años la asociación Córdoba Acoge, al que en esta edición acudieron durante la mañana de ayer en torno a cincuenta inmigrantes en su mayor parte rumanos, marroquíes y, sobre todo, procedentes de Sudamérica. La iniciativa, que se repite en invierno, "coincide con el cambio de estación, en la que mucha gente aprovecha para hacer limpieza en los armarios y se deshace de lo que no le sirve. Es el momento propicio para entregar ropa", explica la coordinadora de Córdoba Acoge, Ana Pérez-Angulo, que destacó la generosidad de los cordobeses.

Uno de los voluntarios que participan en la propuesta es Isabel Organbidez, quien resalta que lo que más se solicita son cosas "prácticas" y calzado, además de vestidos para los más pequeños y ropa de cama y mantas. Afirma que "hay veces que tenemos que decir que no se traigan más prendas --que se reciben durante todo el año-- porque no tenemos espacio para guardarlas". Esta mujer, que junto a otros compañeros, las revisan previamente, arreglándolas si hiciera falta, asegura que "sobre todo, se necesitan prendas de sport que les sirvan para trabajar. En ocasiones nos han llegado incluso trajes de fiesta, pero éstos no resultan útiles".

SERVICIO PERMANENTE

La coordinadora de Córdoba Acoge dijo además que numerosos inmigrantes se llegaban en este tiempo a la sede "ahora que muchos se van a la costa a trabajar o llegan por Córdoba, ya que es ciudad de paso". Asimismo, manifestó que la asociación tenía durante todo el año, como servicio permanente, un ropero. Aunque también había ropa de invierno en el mercadillo, Isabel Organbidez dijo que "no se la han llevado, imaginamos que por las elevadas temperaturas". La sede de Córdoba Acoge se encuentra en la calle Músico Ziryab, 10.