La Subdelegación del Gobierno colaborará en la vigilancia exterior de centros sanitarios en los que se han producido agresiones a médicos, según señaló ayer su responsable, José Antonio Mancheño. Un informe, elaborado por el Colegio de Médicos y enviado a la Subdelegación del Gobierno, destaca que los puntos más conflictivos son los servicios de atención primaria, los puntos de dispensación de metadona de la provincia (que atienden a más de 1.500 usuarios), las urgencias de los tres hospitales y de los ambulatorios del Sector Sur y de la Avenida de América, y centros de salud y urgencias de Peñarroya, Montoro, Palma del Río, Puente Genil, Montilla, Baena y Priego.

El subdelegado del Gobierno indicó que "sólo podemos trabajar en la vigilancia exterior, ya que el control de la seguridad del interior de este tipo de centros es competencia de la Junta". Mancheño añadió, como opinión personal, que si los centros optaran por contratar seguridad privada o alarmas conectadas a la Policía "sería más rápida nuestra respuesta en casos de agresiones". El Colegio de Médicos solicita en su informe que haya "más personal de seguridad en los centros --muy escaso en los hospitales y prácticamente nulo en los centros de atención primaria--. Además, en la práctica totalidad de consultas de riesgo no hay sistemas de alarma conectados al sistema de seguridad, medida que las Administraciones implicadas deben de tomar en defensa de sus trabajadores".