Las ventajas de la Ley de Mecenazgo, o las características del nuevo IRPF, que bajará las retenciones a los que ganen menos de 21.035 euros anuales son algunos de los aspectos que se abordaron ayer en la jornada técnica sobre novedades tributarias para 2003, organizada por la Fundación Ideor de la Cámara de Comercio en colaboración con Cajasur, y a la que asistieron unos 200 profesionales. La inauguración corrió a cargo de Luis Carreto, presidente de la Cámara de Comercio, Francisco Jurado, director general de Cajasur; Javier Martín, profesor titular de la Universidad Complutense, y Carlos Cervantes, subdirector general de Tributos.

Francisco Jurado destacó la importancia de estas jornadas porque aunque todos los años se produce un aluvión de novedades, en esta ocasión se han producido cambios especialmente importantes, algunos de los cuales afectan muy especialmente a las cajas, como es la nueva Ley de Mecenazgo. A juicio de Jurado, la Ley de Mecenazgo incentiva el patrocinio de actividades culturales de las cajas y es beneficiosa porque permite poder destinar a la obra social de una caja el patrimonio de una entidad sin ánimo de lucro que se disuelva. Otra medida importante es aquella que exime a la caja del impuesto de transmisiones patrimoniales. Para Cajasur, dijo Jurado, "estas medidas para la incentivación fiscal favorecerán a la mayoría de los campos de actuación".

Carlos Cervantes, subdirector general de Tributos, fue el encargado de hablar de esta nueva ley, que viene a actualizar la anterior, de 1994, en la que se regulaba el régimen de las fundaciones y de las entidades sin ánimo de lucro. La nueva Ley de Mecenazgo ya no regula las fundaciones, sino que se ciñe a las entidades sin ánimo de lucro, pero en sus aspectos fiscales. Así, regula el régimen que se le aplica a esas entidades, la mayoría exentas del impuesto sobre sociedades y en segundo lugar legisla las donaciones que realizan las personas o empresas a estas entidades, y que tienen una serie de beneficios fiscales.

La segunda ponencia analizó la reforma de los tributos locales, aspecto sobre el que habló Francisco Iglesias Pérez, subdirector general de Tributos Locales. En esta reforma, las dos medidas más importantes son las de la desaparición del IAE para un 90% de los contribuyentes, aunque al resto se le incrementará progresivamente el pago por este concepto. Así, las personas físicas no tributarán y las sociedades estarán sujetas a imposición si facturan más de 1 millón de euros.

Teodoro Cordón, subdirector general del Impuestos Sobre la Renta de las Personas Físicas, habló del nuevo IRPF y su repercusión en otros tributos. Las reformas aplicadas repercutirán, sobre todo, en subidas para las personas que ganan más de 48.080 euros. Los que ganan menos de 21.035 notarán un descenso.

En la última ponencia analizó Javier Martín otras medidas tributarias, como la reforma del IVA, que en telecomunicaciones ha tenido que adaptarse a la normativa comunitaria. Otra novedad son las tasas judiciales, ya que la justicia seguirá siendo gratuita pero no para empresas que facturan más de 6 millones de euros.