Con una diferencia de sólo dos meses, Córdoba volvió a temblar ayer a las 21.35 horas con un terremoto, en esta ocasión de 4,6 grados en la escala abierta de Richter y con epicentro al noroeste de Espejo, muy cerca de la capital cordobesa. A diferencia del seísmo sufrido por la provincia el pasado 21 de noviembre, con 4,4 grados y epicentro al suroeste de Torremolinos, la intensidad del de ayer fue mucho mayor, según fuentes de la red sísmica nacional del Instituto Geográfico Nacional. Esta mayor intensidad sembró la alarma entre la población cordobesa, que en sus hogares o en lugares de disfrute como el Gran Teatro sintieron cómo el suelo temblaba durante varios segundos y que incluso se movían los objetos a su alrededor. Bloques enteros de vecinos se echaron inmediatamente a la calle en diversas barriadas de la ciudad, ante el temor de que pudieran repetirse los temblores. El epicentro del seísmo se situó a 37,77 grados de latitud norte y 4,63 grados de longitud oeste.
El terremoto no causó incidentes de relevancia, según confirmó a Diario CORDOBA el delegado del Gobierno de la Junta, Antonio Márquez, salvo una leve vibración de la vía en la zona de maniobras de la estación de mercancías de El Higuerón, que obligó a que se parase la actividad unos instantes. Además, la alarma causada en la población provocó sobrecargas en la línea telefónica. El seísmo se dejó sentir en casi toda Córdoba, y también en otras provincias colindantes, sobre todo en los municipios de Jaén más próximos al Alto Guadalquivir así como Linares, según comunicó la Unión de Radioficionados de Córdoba. Además, se notó también el terremoto en Albacete y en las localidades extremeñas de Azuaga, Villanueva de la Serena, Don Benito, Cáceres y Zalamea de la Serena.
En la provincia de Córdoba la intensidad del terremoto varió dependiendo de la latitud de los municipios. Concretamente en Espejo, la zona del epicentro del seísmo, la Policía Local recibió numerosas llamadas alertando del suceso aunque sin que se tuviesen lamentar desperfectos materiales. Principalmente, según fuentes policiales, se han movido lámparas, armarios e incluso se han llegado a abrir las puertas en muchos municipios. Especialmente intenso ha sido el seísmo en los barrios más cercanos a la carretera de Granada, aunque menor en la parte alta del pueblo. También han sufrido la intensidad del terremoto los municipios de la Campiña Sur. Tanto en Fernán Núñez como en Montilla el efecto ha sido similar al de Espejo.
EFECTOS EN LOS PUEBLOS
Sin embargo, en Baena, a unos 30 kilómetros del epicentro, los vecinos no notaron movimiento alguno, al igual que los habitantes de la zona sur de la provincia: Lucena, Puente Genil y Priego. En cuanto a las comarcas del Alto Guadalquivir y La Vega la intensidad fue parecida a la de la capital cordobesa. Por su parte, los pueblos del Norte de la provincia notaron en menor medida el movimiento sísmico.
