El médico cordobés Pedro Jesús Gómez Arias acaba de completar en el hospital Reina Sofía su residencia de cuatro años y ya es oficialmente especialista en dermatología y venereología. Y la mejor recompensa que Pedro Jesús Gómez podía recibir después de cuatro años intensos de formación es haber sido elegido por el Reina Sofía como el residente excelente en la promoción de médicos que ha concluido hace unos días la especialidad. El residente excelente es un premio que reconoce la participación en congresos, ponencias, publicaciones, premios o rotaciones en centros externos.

Este doctor estima que todos sus compañeros residentes tienen mucha preparación, «por lo que he tenido mucha suerte de que el Reina Sofía haya concluido que merezco esta distinción». Pedro Jesús Gómez inició una prometedora carrera en 2017, cuando al presentarse al examen MIR, frente a otros más de 13.000 aspirantes de toda España, se quedó en el puesto 36, lo que supuso ser el que mejor nota conseguía en Córdoba y un excelente puesto a nivel nacional. Lograr esa ventajosa posición le permitió sin problema poder hacer la residencia de Dermatología en el Reina Sofía y recibir el premio al Mejor Expediente MIR 2017, que ese año concedió el Colegio de Médicos de Córdoba.

Hijo de una médica de familia en ejercicio, Carmen Arias, y hermano de una futura médica y graduada en Enfermería, este joven facultativo decidió hacer la residencia de Dermatología en el hospital Reina Sofía. Tras concluir su especialización, este doctor va a seguir vinculado al Reina Sofía, donde va a trabajar todo el verano, pero en octubre se marchará durante un año para continuar con su formación en el hospital Mount Sinaí de Nueva York. Ha obtenido una beca internacional para formarse e investigar junto a Emma Guttman en este prestigioso centro. Esta doctora e investigadora es experta en dermatitis atópica y patología inflamatoria de la piel, con una trayectoria reconocida a nivel mundial.

Vinculado al Imibic

Y cuando vuelva, este médico espera continuar trabajando en el hospital Reina Sofía e investigando en el Imibic. Actualmente, el doctor Gómez Arias pertenece al grupo de Enfermedades inflamatorias cutáneas inmunomediadas (GE-03), que dirige el especialista en dermatología del Reina Sofía Juan Ruano.

De forma paralela, Pedro Jesús Gómez continuará trabajando en su tesis doctoral obre la alopecia areata, una patología que se puede cronificar y responde mal a los tratamientos disponibles en estos momentos.

Gómez Arias estudió en el colegio La Salle y luego hizo Medicina en la Universidad de Córdoba. De los cuatro años que acaba de completar de residencia, destaca que «ha disfrutado mucho atendiendo a pacientes y estudiando. Vas aprendiendo cada vez más, reconoces más enfermedades y te satisface comprobar que los pacientes mejoran. El equipo de compañeros con los que he compartido este periodo ha sido muy bueno. Y, a partir de ahora, pues seguiré con la investigación, con la asistencia, haciendo cursos y aprendiendo, porque cada vez la población requiere con más frecuencia consultar con un especialista en dermatología».

Aunque la pandemia del coronavirus, que dura ya más de catorce meses, ha impedido que se celebren de forma presencial congresos, cursos y otras actividades formativas, Pedro Jesús Gómez Arias recalca que eso no le ha impedido formarse lo mejor posible, porque se han buscado alternativas telemáticas y de otra índole para disponer de una adecuada preparación. Ha tenido incluso la oportunidad de impartir alguna clase en la Facultad de Medicina que le vio nacer y crecer como médico y le encantaría que en un futuro no muy lejano poder ejercer también como profesor universitario. Seguro que a este cordobés le seguirán llegando nuevos momentos de éxito.