¿Existe una receta para convertir el mundo en algo mejor? Y si fuera así, ¿quién se encargaría de cocinarla? ¿Los políticos? ¿Los medios de comunicación? ¿Ferrán Adriá? La respuesta es "todos los ciudadanos", indica Elena Nagore, representante de la Coordinadora Andaluza de ONG para el Desarrollo (Caongd), impulsora de la iniciativa Cocina otro mundo . Se trata de una campaña divulgativa para dar a conocer en qué consiste la cooperación internacional, así como el papel de las ONG, que se desarrolla en diferentes puntos de Andalucía hasta el 15 de julio. Ayer le tocó a los cordobeses convertirse en chefs por un día, participando en la "cocina" instalada en el Bulevar de Gran Capitán. En este caso, no era necesario tener conocimientos culinarios, el único requisito indispensable era las ganas de aportar sugerencias para mejorar el mundo y añadirlas como ingredientes a la olla común. Y ¿cuál fue la propuesta de los cocineros cordobeses? pues una receta basada en el empleo, el respeto, la justicia, el amor, la amabilidad o la humildad frente a la ambición política como principales componentes de este "guiso", aderezado con un poquito de buen humor, que falta hace en estos tiempos.

Con esta campaña se pretende despertar el interés de los ciudadanos por la labor de las ONG a través de la creatividad, como ya hiciera la campaña Somos (en la que se animaba a la gente a salir a la calle con una prenda del revés para demostrar que es posible dar la vuelta a las cosas). "En esta ocasión, salimos a la calle para que los ciudadanos nos conozcan y nos planteen sus dudas", asegura Nagore, que mantiene que aún sigue existiendo mucho desconocimiento e ideas preconcebidas sobre la labor que realizan. No obstante, reconoce que "la crítica es buena porque ayuda a mejorar, precisamente por ello queremos que nos propongan cosas". Para fomentar este feedback , la campaña también se ha dado a conocer en redes sociales y en el videoblog cocinaotromundo.wordpress.com, porque a veces una imagen vale más que mil palabras. A este blog se subirán las grabaciones realizadas en la calle con las dudas y sugerencias ciudadanas, y las tres más interesantes de cada semana recibirán respuesta en vídeo por parte de los miembros de las 66 ONG participantes en el proyecto. "Queremos aportar también nuestra propia visión, porque a veces se nos cuestiona mucho, sobre todo con aquello de que el dinero no llega. Puede haber un garbanzo negro, pero el trabajo de la gran mayoría de las ONG es serio y riguroso", afirma Maribel Roldán, otra de las representantes de la Caongd. A pesar de las altas temperaturas de ayer, el "puchero", instalado a pleno sol, tardará en cocinarse, pero los resultados serán muy buenos. "Se están consiguiendo grandes avances gracias a la cooperación para el desarrollo, pero estos frutos son a largo plazo y, si colaboramos todos, serán cada vez más", apunta Roldán.