La cátedra intergeneracional Profesor Francisco Santisteban de la Universidad de Córdoba clausuró ayer el curso 2011--2012 con 1.675 estudiantes, lo que ha supuesto un incremento del 12% con respecto al año anterior y constata el interés de los mayores por acceder a la educación universitaria. Estos alumnos tienen más de 55 años y han participado en las actividades a través de las sedes de Córdoba, Lucena, Priego, Peñarroya, Pozoblanco, Cabra y Puente Genil. En este sentido, la directora de la Cátedra, la catedrática de Literatura Española María José Porro, destacó que el programa ha contado con clases, conferencias, visitas, talleres y viajes organizados "a sitios de todo el mundo", y en total se han ofertado 85 cursos.
Porro también hizo referencia a algunos de los hitos más importantes del curso pasado, como los dos premios entregados a esta sección universitaria (uno de la Consejería de Bienestar Social por su contribución al envejecimiento activo y otro de la Junta en el Día de Andalucía), o la participación en programas internacionales como Grundtvig, lo que ha posibilitado que alumnos de Córdoba hayan ido a la Universidad de Praga. El próximo mes de septiembre, la Cátedra organizará su segundo seminario internacional, dedicado a la solidaridad y la cooperación en tiempos de crisis.
La despedida del año académico fue celebrada ayer en el campus universitario de Rabanales y contó con la asistencia de centenares de personas que llenaron el Salón de actos Juan XXIII. Un grupo numeroso de alumnos recibió los diplomas de la Cátedra y la lección magistral de clausura fue impartida por Celia Jiménez, jefa del Taller de Investigación y Desarrollo de Bodegas Campos, que expuso su trayectoria profesional y disertó sobre el papel de la mujer en la cocina andaluza.
