O sea, que si hay 107 casetas, con la mía son 108. Lo que pasa es que la mía es de papel y la levanto todos los domingos.

Por eso, para empezar, ovación y vuelta para el artículo que en Córdoba en Mayo ha escrito nuestro director de la Real Academia de Córdoba, Joaquín Criado Costa, que solo el título dice una verdad como una Catedral-Mezquita de grande: "Nos vendieron humo", donde se canta las cuarenta a los que nos engañaron a propósito de la frustrada capitalidad cultural europea.

Pasemos hoja, porque estamos en una caseta en la que servidor lo que desea es ofrecer alegría, o por lo menos una sonrisa. De ahí que debamos recoger las fotografías de la primera comunión de la gente menuda del matrimonio Finito de Córdoba y Arantxa del Sol. El, elegante; ella, bella como siempre. Muy buena imagen de nuestra Córdoba, guapa y valiente.

Quiero compartir con ustedes esta buena noticia: se nos casó Sonsoles Suárez, con la que durante mucho tiempo compartí mesa y trabajo en aquel programa inolvidable de Antena 3, A toda página . Me gusta saber que está más bonita que nunca. A veces, en aquellas tardes compartidas con Rosa Villacastín hablábamos de Córdoba. Felicidades Sonso, niña.

De toros, que no nos falte. José Tomas, que empieza de nuevo estos días, quiere torear en Córdoba. Sé que no es fácil, pero, ¿qué se puede hacer por conseguir el milagro? Mientras tanto, Carlos Herrera está feliz en los patios. Y Antonio Gala, valiente, escribiendo su columna diaria, a la hora de defender el aceite de oliva. Nuestro aceite de oliva.

Le he dicho que no a Julia Otero, que deseaba que le hiciera unas preguntas a Cayetano Ordóñez en su próximo programa en TVE-1. Estoy más cerca de su hermano, Paco, no sé por qué, y más después del otro día, que tuvimos la alegría, al menos por mi parte, de almorzar juntos en Ronda. Me gusta mucho conocer a los toreros vestidos de calle. Hay grandes sorpresas. Me acerco a ver en el museo de Las Ventas el traje de luces que llevaba Manolete en la tarde aciaga de Linares. Impresionante ver la sangre seca de sus bordados. Escalofrío.

Hace diez años se nos fue Vicente Núñez. Tengo cerca, en mi mesilla de noche, sus libros de versos. Que no se apague nunca la memoria, sobre todo la de los poetas.

Y también, sombrero en mano para la Tomata, a la que conocí en la doble moneda de su éxito y de su quiebra. En las dos ocasiones la ayudé. Es muy hermoso que la sensibilidad sea lo mejor de nuestra cosecha, porque así es la vida, que da muchas vueltas. Como es el caso de Joaquín Cortés, que aunque no tenga un euro sigue bailando cada día mejor. Y en mayo, mejor que nunca.

Y Bob Dylan acaba de cumplir setenta años. Felicidades maestro, siempre en su mejor fotografía, la que más reparte, la de su sombrero cordobés puesto. Porque es lo que yo digo, la vida es una feria. O mejor, la feria de la vida.