-Felicidades por su santo.
-Igualmente, tocayo.
-¿Lo ha celebrado usted, está para celebraciones?
-Más que nunca, estoy muy ilusionado. Al estilo antiguo, cada 24 de octubre.
-Acabemos pronto lo del triste suceso. ¿Cómo se siente y qué quiere decir?
-Que cada uno se meta la mano en el pecho y piense aquello de que el que esté libre de pecado que tire la primera piedra. Lo demás ya lo he dicho en el comunicado.
-Los periodistas no paran de preguntarle por el tema, ¿verdad?
-Claro, pero yo me atengo a lo que he dicho y ya está.
-Pero ahora, cuando cante algunas canciones, muchos pensarán que van dirigidas a alguien.
-Pensarán de todo, porque desgraciadamente hay demasiadas mentes perturbadas en el mundo.
-Y ese ´¿Quién te crees tú?´ va para-
-Para nadie en especial (ríe con sorna). Es el título del disco. Lo he elegido porque es poderoso como los anteriores: Puta mentira , Amar duele -
-Y amar sigue doliendo, ¿verdad?
-En todos los sentidos: cuando lo tienes todo, cuando se quiere, por celos, por desamor. Amar termina doliendo y es señal de que uno está vivo, eres persona y tienes corazón.
-Y duele el temor de que se pueda perder-
-Claro, pero no sólo en mí. En cualquier persona.
-¿Qué quiere expresar en el disco?
-Darle a mi público mucha verdad, arte, que se me note que voy mucho más maduro en la música.
-Porque ha aprendido de lo anterior.
-De otros discos, de otros artistas y de los grandes.
-¿Los otros artistas le hacen sentir solo o hermanado con ellos?
-Soy amigo de mis amigos, compañero de mis compañeros, y artista en el escenario y ahí no tengo rival. Pero sólo ahí, como profesional.
-El lunes que viene lo estrena en Madrid.
-En el Teatro Alcázar, lunes y martes. Tengo más ganas de cantar que nunca.
-Y de romperse en el escenario.
-Pero no porque tenga rabia contenida, ni por dolor. Simplemente por necesidad como ser humano.
-¿Cómo lleva este ir de un lado a otro de promoción?
-Mal, mal (ríe), porque hay que levantarse temprano, te cansas, pero no soy yo sólo el que trabaja.
-¡Y qué malo es madrugar!
-Yo verdaderamente cuando me inspiro es por la noche que es cuando me pongo como una cabra.
-¿El artista debe reír aunque su alma esté rota?
-No. Se debe mostrar tal como es. Pero las espinas me las quito yo y las heridas me las cierra el aplauso del público.
-¿Canta por necesidad, por placer o por dinero?
-Porque no sé vivir sin cantar.
-Si Dios no le hubiera dado facultades-
-Cantaría igual, me saltaría las reglas de la vida.
-¿Qué le gusta de Córdoba?
-Me hace sentir grande, aún más artista de lo que uno cree. Es uno de esos sitios a los que siempre quieres volver.
-Una letra que ahora se le venga al corazón-
-Penita, Pena.
-Falete, qué sabe nadie.
-Y que no lo sepa.