Actualidad blanquiverde
Córdoba CF-Real Oviedo: el partido en cinco claves
Los de Ania quieren cerrar la sequía en casa ante un rival renovado con su cambio de entrenador

Lance de la sesión a puerta abierta del pasado viernes en El Arcángel. / VÍCTOR CASTRO

Entra el Córdoba CF en la primera de sus últimas siete finales en la agenda regular de Segunda División. Y todo abierto continúa para los de Iván Ania, que este domingo retoman la competición con otro duelo de altura, también repitiendo en El Arcángel: frente al Oviedo a partir de las 16.15 horas. Será en Domingo de Resurrección cuando planteen los blanquiverdes derribar esa barrera mental -otra vez- que se ha edificado en el feudo cordobés en esta segunda vuelta, en la que el rendimiento como local es el único lastre. Además, toca ante un rival de altura con propósitos nobles, por lo que alicientes sobran.
El punto de inflexión
Frente a los ovetenses surgen motivos para creer que el pasado empate frente al Levante, tanto por su valor como por sensaciones, incluso por la forma en la que se amarró el punto -un épico gol de Rubén Alves en el tiempo de descuento-, podría suponer ese ansiado punto de inflexión para cambiar la dinámica en casa. Porque si los califas son el mejor equipo a domicilio del 2025, en el hogar arrastran meses sin encontrar el equilibrio entre el juego y los resultados. Solo una victoria se ha celebrado en territorio cordobés en lo que va de segunda vuelta, correspondiente a la goleada al Granada.
Pero ante los granotas fue la primera vez que la cancha cordobesa no cede los tres puntos ante un equipo colocado entre los siete mejor clasificados de la división de plata. Cerca estuvo, eso sí, aunque la terrible racha se rompió parcialmente. Recuerda eso, precisamente, a la tendencia que también se rompió durante el pasado diciembre en la visita al Carlos Tartiere, hogar del Oviedo, en el que los de Ania lograron amarrar su primera victoria a domicilio (2-3). Y desde entonces ya suman nueve salidas consecutivas puntuando.

Carracedo pugna por el esférico durante un lance del Córdoba CF-Levante. / A.J. GONZÁLEZ
Sin mucho margen
Por otra parte, si lo que el Córdoba CF pretende es engancharse a los puestos con derecho a participar en la fase de ascenso una vez se completen las 42 jornadas del calendario, la de este domingo será una de sus últimas oportunidades. Porque de valor fue el punto cosechado, o más bien arañado, ante los levantinistas, aunque insuficiente para aguantar el ritmo al resto de aspirantes al play off. Cumplieron prácticamente todos los rivales directos, dejando el sexto puesto, en manos del Huesca, a ocho puntos de distancia actualmente. Es décimo el club cordobesista, con 49 puntos y otros cuatro equipos por delante en la carrera: Burgos (50), Granada (55) y Almería (56).
El descenso, sin embargo, se mantiene a una distancia considerable. No logró puntuar el Eldense en su choque frente al Real Sporting de Gijón de hace una semana, dejando en diez, es decir, uno más, los puntos de colchón de los blanquiverdes a falta de tan solo otros 21 en juego en lo que resta de campaña regular.
El Oviedo, con otro aire
El rival llegará reforzado por sus últimos resultados y el estímulo que ha supuesto la llegada de Paunović a su banquillo. Relevó el serbio a Javier Calleja hace tres jornadas y el rendimiento desde entonces ha sido prácticamente inmediato: dos victorias y un empate. Quinto tiene a su Oviedo, que viene de golear al Ferrol (3-0) hace tan solo unas fechas y con 58 puntos en el casillero. Solo cinco lo separan de las plazas de ascenso directo, por lo que sus opciones son reales.
También son un bloque sólido a domicilio, concretamente el séptimo mejor de la categoría, con 22 puntos. Son esos los mismos que registran los blanquiverdes, aunque con un partido más y peor balance goleador que el club asturiano actualmente. Entre los últimos tres desplazamientos carbayones, eso sí, no han logrado ningún triunfo, con solo un punto de los nueve más recientes en juego.

Paunović, durante una sesión de trabajo del Real Oviedo. / REAL OVIEDO
Duelo goleador: Casas y Alemão
Clave serán las áreas, una parcela en la que ambos equipos vienen destacando esta temporada. El cuarto equipo más goleador de toda Segunda División es el adiestrado por Ania, con 49 dianas -las mismas que el Castellón-, mientras que el Oviedo, con 48, tan solo parte una posición por debajo en esta tabla particular. Y buena parte de los números de ambos bloques se corresponden con la producción de sus artilleros. En el bando cordobés, una profunda sequía anotadora atraviesa Antonio Casas, pichichi del plantel, que suma nueve dianas y solo ha celebrado una en todo lo que va de segunda vuelta. A raíz de su alternancia en la titularidad con Obolskii ha recuperado cierto olfato, no obstante, rondando el gol en sus últimas actuaciones: un larguero ante el Levante y uno anulado frente al Málaga.
Invita todo ello a pensar que el rambleño está afinando tras meses de caminata por el desierto, al contrario que un Alemão que sigue siendo uno de los nombres propios del fútbol de plata este año. 14 son las dianas que acumula el brasileño, máximo artillero del Oviedo y cuarto en la general por el pichichi, que lidera con puño de hierro el punta del Almería Luis Suárez (23). Junto a Ilyas Chaira, que marcó un golazo en el duelo de la primera vuelta, forma una interesante dupla el de Anchieta, quien se antoja como la referencia ofensiva a vigilar por los califas en el encuentro de este fin de semana.
Rubén Alves y Sala, en el foco
Y ante su Oviedo, Iván Ania tejerá su plan con un par de dudas. Lógicamente, no podrá emplear a Adilson Mendes ni Matías Barboza, lesionados de larga duración -no volverá ninguno este curso-, tampoco a Alberto del Moral por contrato -claúsula del miedo-, pero sí espera poder contar con los servicios de dos piezas capitales como son Álex Sala y Rubén Alves, ambos entre algodones en los últimos días. Por precaución no se ejercitó el catalán durante la sesión a puerta del viernes, si bien apunta al choque, mientras que el hispano-brasileño, tocado desde la pasada cita frente a los levantinistas, sí que se ejercitó de forma parcial y, aunque justo, la idea es que llegue en condiciones de poder participar en la cita de este domingo.
Por el lado rival, no estarán Lucas Ahijado ni Quentin Braat, tocados esta semana, ni tampoco los lesionados Paulino ni Álvaro Lemos, junto al ya mencionado Chaira, que se perfila como la baja más sensible para Paunović en vísperas del encuentro.
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