El Córdoba CF se juega el objetivo en casa: El Arcángel, ante su gran examen

Llega el momento donde se separan los que miran de los que creen, o al menos sobre el papel. El campeonato entra en su recta más decisiva, con 21 puntos en juego y el Córdoba CF en plena batalla por meterse en el play off. Y si hay algo que puede marcar la diferencia en una carrera tan igualada, eso es el empuje de su gente. Pero El Arcángel, hasta ahora, no ha terminado de despertar del todo. Ha habido ruido, sí. Algún rugido. Pero no el estruendo que se espera de un estadio que quiere ser el impulso que ilusione a los de Iván Ania en esta recta final de Liga en Segunda División.

Porque si algo está claro, es que al Córdoba CF le quedan 12 puntos en casa que pueden definirlo todo. Sin embargo, los datos apuntan a una cierta frialdad -en términos de asistencia, no de ambiente- en las gradas del coliseo blanquiverde durante este último tramo. Frente al Levante, por ejemplo, se firmó la novena mejor entrada del curso, con 15.879 aficionados en la grada, aunque el clima fue de libro. Casi 16.000 almas, pero por debajo de la media que ha marcado la temporada, de 15.948.

El séptimo en la lista

No es una mala cifra. De hecho, el Córdoba CF ocupa la octava posición en el ranking de asistentes de Segunda División, una lista que lideran otros dos recién ascendidos como el Málaga (25.061) y el Deportivo de la Coruña (22.472). Pero también es verdad que El Arcángel no ha colgado aún el cartel de «no hay billetes» en lo que va de curso y pocas veces se ha acercado. Ni en el derbi ante los malagueños, que firmó la segunda mejor entrada (18.110), ni siquiera en la cita de más tirón, el Córdoba CF-Zaragoza de la primera vuelta, que congregó a 18.189 espectadores.

En términos de ocupación, el estadio cordobés ha promediado un 73,1% de su capacidad cubierta esta temporada, siendo el sexto con mejor porcentaje en relación a aforo y asistentes en el fútbol de plata. Un número que suena razonable… pero algo por debajo de cruces similares durante el arreón final de Liga del pasado curso en Primera Federación. Fue ante el Eldense (2-0), en la jornada 12, cuando se produjo la peor entrada de la temporada, con un total de 13.453 aficionados recontados en los tornos.

Momento de empujar

Y es que al conjunto blanquiverde le quedan cuatro partidos en casa. Cuatro finales, si se quiere. Oviedo, Cádiz, Mirandés y Albacete visitarán el Reino en estas semanas clave. Y el objetivo, meterse en la fase de ascenso, pasa por recuperar la esencia perdida en el hogar, en el que hasta el cierre de la primera vuelta todo eran festejos. El contexto acompaña. El bloque está compitiendo con empaque, el objetivo es real y los rivales son de enjundia. La grada también respalda, pero puede dar otro salto.

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