La temporada del Córdoba CF ha sido para olvidar. Si en los tres primeros meses la afición cordobesista soñó con algo grande y la posibilidad de repetir un segundo ascenso consecutivo -algo nunca logrado en la historia del club-, los seis meses restantes han sido un calvario.
Córdoba CF, Osasuna B y Alcoyano
El 2023 será recordado como un año triste en clave blanquiverde, hasta el punto de que las dos únicas victorias que ha logrado el Córdoba CF en este año -en San Fernando y en El Arcángel, ante la Cultural Leonesa- evitaron que esta última jornada se viviera con miedo y tensión por parte de sus aficionados. Esos seis puntos garantizaron la tranquilidad absoluta por parte del conjunto blanquiverde, que afrontará la última jornada liguera con la tranquilidad de que nada tiene que hacer. Tranquilidad y castigo, por supuesto.
De hecho, el Córdoba CF es uno de los tres equipos, de los 40 que componen la Primera Federación, que no se juega nada en la última jornada de Liga y que nada le ha dado o quitado la categoría, junto al Osasuna B y el Alcoyano, del Grupo 2. Si se exceptúan a los equipos ya descendidos, el conjunto blanquiverde será el único equipo del Grupo 1 que el próximo sábado vea la jornada como un mero trámite y la observará como lo hacen las vacas con el tren. El Talavera y el Pontevedra, en el Grupo 1, tienen la triste tranquilidad de que ya son equipos de Segunda RFEF, al igual que la UD Logroñés, el Calahorra, y el Bilbao Athletic, del Grupo 2.
Si exceptuamos a esos cinco descendidos y al Córdoba CF, el Osasuna B y el Alcoyano -el enfrentamiento directo en la última jornada entre el Real Unión y La Nucía hace imposible que los dos equipos puedan adelantarle-, los 32 equipos restantes se juegan algo, aunque sea con mínimas esperanzas o posibilidades, en la última jornada de Liga, desde el ascenso directo a una plaza para la Copa de la próxima temporada.
Ascensos, descensos y Copa del Rey
El Racing de Ferrol, el Alcorcón, el Amorebieta y el Eldense pelean por dos plazas de ascenso directo. El Castilla, el Deportivo, el Castellón, la Real Sociedad B y el Barcelona Atlétic luchan por la tercera plaza de sus grupos, mientras que el Celta B, el Linares, el Unionistas de Salamanca y el Murcia también pelean por alcanzar una plaza de play off. Asimismo, el Mérida, el SD Logroñés, el Nástic, el Sabadell y hasta el Intercity mantienen esperanzas de lograr plaza para la Copa del Rey de la próxima temporada.
Y, finalmente, la pelea por el descenso, en la que hay inmersos hasta 17 equipos entre los dos grupos. En el Grupo 1, la Cultural, el Ceuta, el San Fernando, el Rayo Majadahonda, el Algeciras, el Sanse, el Badajoz, el Fuenlabrada y la Balompédica Linense están inmersos en la pelea por la salvación, mientras que en el Grupo 2 los implicados son La Nucía, Numancia, Cornellá, Real Unión y Atlético Baleares.
Por lo tanto, el Córdoba CF es el único equipo del Grupo 1 de Primera Federación que no se juega nada en la última jornada de Liga y uno de los tres de entre los 40 de la categoría, si se exceptúan a los equipos ya matemáticamente descendidos. Un triste final para un equipo que llegó a ilusionar durante los tres primeros meses de Liga, que dieron paso a más de cinco meses de decadencia y fracaso a los que el club no puso remedio -o se lo intentó poner demasiado tarde- y que, por ahora, ha costado la cabeza tanto a su entrenador, Germán Crespo, como a su consejero delegado, Javier González Calvo.