La última vez que el Córdoba CF y el San Sebastián de los Reyes cruzaron sus caminos estaba, hasta ahora, sepultada en el capítulo de los peores recuerdos. Los blanquiverdes perdieron y el mejor del partido fue Owusu. El 2-0 en el Estadio Matapiñonera sacó las vergüenzas del Córdoba en la Copa del Rey, de la que fue eliminado nada más estrenarse. Así eran las cosas en las vísperas de la navidad de 2019, con el club en un proceso de convulsión brutal y la marcha deportiva supeditada al caos generalizado de la entidad.
El curso había empezado con Enrique Martín en el banquillo. Le echaron a las nueve jornadas. Al frente estaba un atribulado Raúl Agné, atrapado en una situación imposible. De aquel equipo que salió a disputar como pudo aquella eliminatoria copera no queda nadie ya. El único, un Raúl Cámara que ahora forma parte de la dirección deportiva al lado de Juanito. Edu Frías, Cámara, Fernando Román, Ángel Moreno, Víctor Ruiz, Chus Herrero, José Antonio González, Zelu, Sebas Moyano, Fran Gómez, Juanto Ortuño, Imanol García, Antonio Moyano y Owusu salieron al campo. El ghanés puso algo de picante, tirando de su motivación personal -básicamente salir de El Arcángel cuanto antes, lo que consiguió en el mercado invernal- para dar algo de lustre a una derrota sin paliativos.
El Córdoba CF, casi tres años después, es otro. Ahora, tras salir de los infiernos de la Segunda RFEF, es líder de su grupo en la Primera Federación y lleva enlazadas 21 victorias en su hogar. Aquella afrenta de la Copa queda como un estímulo más para la afición -algunos de los que estuvieron allí acudirán también a El Arcángel- que para un equipo que anda ahora en una órbita diferente.
Los duelos de los ochenta
El Córdoba CF ochentero, un histórico que trataba de salir de la Segunda B con presupuestos altos, exigencias fuertes y mucha prisa, se enfrentó en cuatro ocasiones al Sanse en el grupo 3 de la categoría, que en aquellos años tenía bastante empaque.
El balance es positivo para los blanquiverdes, que ganaron dos veces y empataron otras tantas, sin caer derrrotados en las campañas 87-88 y 88-89. En la primera de ellas hubo empate (1-1) en ambos estadios. En El Arcángel marcó Toto y en San Sebastián lo hizo Mariano Mansilla en una época en la que se exprimía a una hornada de canteranos con Jorge, Vinuesa, Rícar, Luna Eslava, Valentín... Roque Olsen estuvo en el banquillo en la primera vuelta y Campillo en la segunda. Aquel Córdoba fue quinto, quedándose fuera del play off. En la siguiente, dos triunfos cordobesistas. Goleada en El Arcángel (5-1), con López Murga (2), Hueso, Gálvez y Luna Eslava como anotadores, y 0-1 en Madrid con un tanto rubricado por Ramón, en propia puerta y en el último minuto. Esos tres puntos fueron los mismos que marcaron la diferencia entre los blanquiverdes, en el puesto 13º a la conclusión de un curso horroroso, y el Sanse, que terminó descendiendo a Tercera.
