Solo quedará en el susto, aunque uno muy doloroso. Para alegría del Córdoba CF, la situación de Antonio Casas no parece revestir mayor gravedad que la del golpe sufrido durante los últimos lances del encuentro ante el Pozoblanco en el Municipal (1-2), en el que el rambleño tuvo que retirarse, entre lágrimas, para dar entrada a Sergio Benito, después de recibir un fuerte golpe en la zona lumbar, a la altura del coxis. Tras las primeras exploraciones realizadas por los servicios médicos en el terreno de juego y las posteriores llevadas a cabo durante la pasada madrugada en el Hospital San Juan de Dios, la situación del atacante parece no ir más allá del dolor por el encontronazo, agudo, eso sí, cuanto menos, aunque sin lesión aparente de por medio y a la espera de realizarse más pruebas durante los próximos días, también pendiente de evolución.
El delantero blanquiverde estuvo presente en la sesión de trabajo de este jueves, la ideada para la recuperación después del duro choque en tierras vallesanas, donde volvió a verse a Antonio Casas ejercitarse junto al grupo durante el primer tramo del entrenamiento, haciendo un circuito de activación y fuerza apenas unas horas después del lance que lo dejó entre lágrimas, cuando corría el minuto 83 en el Municipal. También pudo verse el regreso de Javi Flores durante la matinal, ausente en el encuentro ante el Pozoblanco por un también doloroso golpe recibido en Chapín. En cuanto al rambleño, una vez culminado el primer tramo de ejercicios, abandonó el recinto de la Ciudad Deportiva, para seguir con su trabajo al margen -fundamental de bicicleta- en las instalaciones del estadio, donde ha culminado la mañana de forma positiva.
Su situación, de esta forma, parece que no implicará la entrada de otro efectivo más a la ya cada vez más vacía enfermería blanquiverde, donde durante las últimas fechas la carga de lesiones se ha aliviado en buena medida, con la única presencia de Ekaitz Jiménez -decano de la misma esta pretemporada-, Carlos Daniel y Adrián Turmo hasta el momento, puntualizando con la recuperación y las buenas sensaciones de Adrián Fuentes tras sus primeros minutos vestido de corto después de la dolencia en el cuádriceps que le ha mantenido fuera del esquema durante las últimas semanas. José Calderón, al igual que el madrileño, también presenta ya un estado óptimo tras llegar entre algodones del pasado curso. No habrá que lamentar más bajas, o al menos por el momento.
