Que el gol marcado le sentó como el chorro fresco de un búcaro en una tarde de agosto cordobés quedó más que claro. La coreografía de la celebración de Willy Ledesma resultó significativa. Sus compañeros le abrazaron con un extra de efusividad. Su tanto, el cuarto de la mañana, con el adversario ya vencido, le reportó tranquilidad... y ventaja en la carrera por ser el máximo goleador del equipo. El de Torremejía ya lleva 15 en Liga con el Córdoba CF. Poco antes, Antonio Casas había firmado un doblete que dejaba su marca en 14. La competencia interna ha llevado al equipo a niveles de excelencia. Entre ambos suman más goles que muchos equipos.

"El pique ha sido el todo el año", admitió sonriente en la sala de prensa a propósito de su duelo con el rambleño Casas, aunque también andan cerca Adrián Fuentes (13) y Miguel De las Cuevas (13). "Hemos estado haciendo goles y siempre hay que mirar el objetivo común, el que sea máximo goleador pues será, pero el objetivo del Córdoba es lo primero", apuntó.

Sobre la victoria por 5-1 ante Las Palmas Atlético, Willy expresó una opinión clara: "Era un partido para disfrutar con la afición en nuestro campo, seguir con la línea que nos hemos marcado de no perder ningún punto en nuestro campo y así se ha dado". Para el punta, la clave estuvo en "salir como en todos los partidos" para conseguir un triunfo que "ha sido justo".

Willy, uno de los futbolistas que ostenta la condición de capitán y miembro del cuarteto -junto a Flores, De las Cuevas y Bernardo- que continúa desde la pasada temporada, manifestó que su táctica para recuperar el acierto era seguir en el día a día. En las últimas jornadas coleccionó ocasiones que no fructificaron. El atasco terminó. "He seguido trabajando siempre para que llegue el gol. Hoy ha llegado porque el fútbol es como la vida: hay que seguir trabajando aunque las cosas no salgan porque al final encuentras la recompensa. Yo estoy tranquilo por el gol y por la victoria", explicó ante los medios.

"Claro que motiva ser el máximo goleador, pero yo soy un jugador que mira al colectivo y que se consigan los objetivos grupales", insistió el veterano ariete, que recordó la experiencia pasada. "El año pasado quedo pichichi del equipo y fue un fracaso", indicó, concluyendo que "el pichichi que sea el que sea y ya está, lo importante es que todos sumen".