La inminencia del objetivo ha puesto al cordobesismo a punto de ebullición. Arropado por sus fieles, líder destacado y con el título a dos victorias de distancia, el conjunto de Germán Crespo viaja a Cáceres con la sensación de estar viviendo los capítulos finales de una aventura singular: la división en la que purga sus pecados se ha transformado en un generador de alegrías. Y aún queda la explosión definitiva, que cada uno celebrará a su modo.

El Córdoba CF disputa ante el Cacereño el mejor partido posible en el grupo 4 de la Segunda RFEF y, seguramente, el más atractivo toda la categoría. Los blanquiverdes van primeros con 65 puntos, doce más que un Cacereño que suma 53 y que tiene al Mérida y a Ceuta, tercero y cuarto respectivamente, a siete puntos. Lo de que el Cacereño desbanque al Córdoba como líder y termine ascendiendo es solo un juego de retórica y emociones contenidas sobre un fondo de matemáticas retorcidas. Sea cual sea el marcador final en el Estadio Príncipe Felipe de Cáceres, el Córdoba terminará ascendiendo y el Cacereño lo intentará por la vía del play off. Es simple cuestión de tiempo y de inercias. Y, obviamente, de la calidad demostrada por ambos en este curso 21-22. Lo del Córdoba es de otro mundo. Con sus números actuales, el Cacereño sería un candidato a proclamarse campeón en cualquiera del resto de los grupos de la categoría.

¿Qué quiere ahora el Córdoba? Germán Crespo no escondió las apetencias del vestuario, que coinciden con las del grueso de una afición que ha padecido una cruel secuencia histórica: los descensos, en casa; los ascensos, fuera de ella. Están bien los viajes largos, el regusto del triunfo en tierra hostil, la euforia de los recibimientos... Desde Valdepeñas a Las Palmas, pasando por Cartagena o Huesca, el cordobesismo se ha abonado a vivir los saltos de categoría desde la distancia.

«A ver si podemos dar la alegría a nuestra afición de tener el ascenso en casa», declaró el técnico del Córdoba CF en su última comparecencia. La cuestión es que si el choque termina con los tres puntos en el casillero cordobesista, el partido del sábado 9 de abril ante el Villanovense en El Arcángel propiciaría esa ocasión tan anhelada: un triunfo contra los de Villanueva de la Serena -los únicos, ojo, que han ganado esta temporada al Córdoba- significaría el billete automático para la Primera RFEF 22-23 y el título de campeón, segundo que vería en directo la hinchada blanquiverde después de la conquista de la Copa RFEF. Sería un hito irrepetible, puesto que el siguiente desafío de la entidad será no volver a disputar más estas competiciones en el futuro.

Cartas guardadas

Fiel a su norma, Crespo se reserva para sí sus planes para zarandear el once o mantenerlo fijo. No contará con José Alonso, que aún no está restablecido de su lesión, ni con Ekaitz Jiménez, fuera de la dinámica del plantel en las últimas semanas por molestias en el pubis y en una rodilla. El lateral vasco, un fijo en las alineaciones desde el arranque de la temporada, está siendo sometido a un seguimiento de los servicios médicos para determinar si podría ser útil en el campo. Si finalmente queda descartado, Crespo recurrirá a la opción de Dragisa Gudelj en la banda izquierda, dejando los puestos en el centro de de la zaga para José Cruz y Ricardo Visus o Bernardo Cruz, que esta semana ha estrenado paternidad. El regreso a la titularidad de Miguel De las Cuevas, que salió desde el banquillo en Montijo, al igual que Adrián Fuentes, daría un cambio al dibujo táctico empleado en el Emilio Macarro.

Los dos mejores de la Liga se cruzan, curiosamente, después de no resolver sus encuentros más recientes. Los blanquiverdes empataron en el campo del Montijo (1-1) y los cacereños cayeron en Lepe ante el San Roque (2-0) y empataron sin goles en el Silvestre Carrillo de La Palma ante el Mensajero. Esos marcadores desinflaron algo las expectativas de un duelo cuya trascendencia queda para el futuro. El Córdoba retrasaría su alirón si no gana, mientras que el Cacereño vería comprometida su situación si sus perseguidores se acercan. «Al final son ellos los que se la juegan a los que les va la vida», recalcó Crespo, que augura una contienda de alto voltaje. En la primera vuelta, los suyos se impusieron en El Arcángel por un rotundo 5-0, pero el Cacereño es otro al calor de su hogar. De hecho, solo el Córdoba -que los ganó todos- lo hizo mejor como anfitrión. El equipo que entrena Julio Cobos ganó nueve, empató cuatro y solo perdió uno de sus 14 partidos caseros, con 24 goles a favor y diez en contra.

Buen estadio, buen ambiente, primero contra segundo, puntos con trascendencia... Será un partido de una categoría superior, como la que ambos buscan. Cada cual por su carril. 

Alineaciones probables

Cacereño: Bernabé, Espinosa, Josín, Marvin, Gayoso, Kamal, Bermúdez, Yale, José Ramón, Andújar y Rubén Solano.

Córdoba CF: Carlos Marín, José Ruiz, José Cruz, Visus, Gudelj, Javi Flores, Álex Bernal, Adrián Fuentes, De las Cuevas, Simo y Willy Ledesma.

Árbitro: Eder Mallo Fernández (Comité Castellano-Leonés).

Campo y hora: Estadio Príncipe Felipe (17.30, Footters).