No es sencillo manejarse en medio de un clima de euforia en el entorno y preparar los partidos con la máxima exigencia. Tampoco es que sea una tortura, pero hay que saber qué decir en cada foro: en la sala de prensa y en el césped. Ante la jauría mediática, mensajes de mesura; sobre el verde -o el color que tenga la superficie en la que le toque jugar en esta singular categoría-, ambición plena y hambre por hacer historia. Germán Crespo, el entrenador del Córdoba CF, crece al mismo ritmo que el club. De abajo a arriba. Sabiendo por dónde pisa porque sabe de qué van estas divisiones en las que todo el mundo quiere hacer "el partido de su vida" frente a un Córdoba cuya idea fundamental es huir de aquí lo antes posible. Ya llegarán los tiempos de pisar moqueta. Ahora toca otra tarea. El domingo, a Don Benito. Por allí ha aparecido tres veces el equipo blanquiverde en los últimos sesenta y seis años. Siempre ganó. Y quiere volver a hacerlo.

"Jugamos contra un equipo totalmente diferente al que vimos aquí", advirtió Crespo a propósito del Don Benito, que al mando del cordobés Juan Carlos Gómez le llegó a poner un nudo en la garganta al Córdoba en la primera vuelta (3-2). Fue el que más peleó los puntos en El Arcángel. Ahora, "con el cambio de entrenador, le dan más importancia a la parcela defensiva; intentan jugar con las líneas juntas y a partir de ahí se hacen fuertes y buscan la velocidad por las bandas y el contraataque", indicó el técnico cordobesista, aunque matizó que "entre lo que vemos y los planteamientos que nos hacen los domingos suele haber mucha diferencia". Ante esta tesitura, solo queda repetir el plan.

El Córdoba CF tiene un estilo que funciona, con el que se siente realizado. Su colección de récords -gana más partidos que nadie y hace goles con fluidez- refrenda que su opción es la correcta. "Vamos a buscar lo de siempre, hacernos con el dominio del balón. Es importante tener la posesión", señala Crespo, quien insistió en clonar lo que sucedió en la primera salida de la segunda vuelta. "Queremos hacer algo similar a lo del día del Cádiz, saliendo intensos en los primeros minutos y sobre todo seguir con la filosofía que estamos teniendo. Tenemos que ser intensos, agresivos defensivamente, tratar de recuperar lo antes posible y luego con nuestras variantes en ataque hacernos con los tres puntos". 

Los que van detrás

El desenlace del encuentro, que "va a ser complicado", dijo, puede conllevar premio extra según se resuelva otro partido. "Hay un enfrentamiento entre el Coria y el Cacereño y a ver cómo podemos terminar la jornada". Ahora le saca doce al Cacereño y catorce -más el average- al Coria. Una barbaridad. Y, claro, este panorama ha hecho que las cábalas sobre el ascenso se hayan convertido en una gozosa rutina para los cordobesistas.

"Lo comentamos el miércoles en el grupo. Está claro que tenemos la máxima diferencia, pero esto en dos semanas si te relajas cambias. Aquí puedes pasar de tener doce puntos a tener seis si no haces las cosas bien", dijo Crespo a modo de advertencia. "La euforia la tenemos que dejar para el exterior", insistió, subrayando que de puertas para adentro tienen fijada la actitud que deben mantener. "Los que estamos dentro tenemos claro que hay que ir partido a partido y sumar de tres en tres. Todavía quedan muchísimas jornadas", dijo el granadino, quien tiró de historial para acentuar el peligro de dejarse llevar y pensar que el final del camino es solo cuestión de tiempo. "He vivido experiencias en otros años de tener el objetivo casi conseguido y cometer tres o cuatro errores que te llevan todo al traste", expuso.

No parece, no obstante, que el grupo se haya adormecido al calor del éxito. Más bien sucede al reves: la competencia interna es feroz y todo el mundo quiere ser partícipe en una campaña histórica. "Las sensaciones del equipo son muy buenas y la gente puede hacer cábalas de cuándo se va a conseguir, pero eso ya se verá. Ojalá sea lo antes posible. Nosotros tenemos que ir domingo a domingo, sumando y con los pies en el suelo", zanja Crespo, quien ve a los suyos en una dinámica excelente, pues "el equipo venía de hacer buenos partidos en campos complicados, de dimensiones cortas, y generaba ocasiones". "Nos gustaría repetir las sensaciones y el partido de Cádiz porque si somos capaces de hacerlo será complicado que no volvamos con los tres puntos", apostilló el entrenador de un Córdoba que quiere seguir rompiendo su techo.