La afición del Córdoba CF disfrutó este domingo de un plácido partido en El Arcángel. En la despedida del año 2021, el coliseo ribereño tuvo una serena mañana en la que el frío, presente en todo momento, no mermó los ánimos. Todo estaba preparado para una fiesta navideña y el equipo no falló. Con 3-0 en el marcador, los niños ya estaban preparados con el pitido del árbitro que marcaba el descanso para recoger sus juguetes. Hasta mil repartieron los voluntarios del club. Camisetas, polos, jerséis, bufandas y otros detalles que los chiquillos recogieron con algarabía en una mezcla de regalos de Papa Noel anticipados y Cabalgata de Reyes.
Tan tranquila fue la cosa ante el Panadería Pulido que no fueron pocos los aficionados que, al descanso, comentaban cuestiones familiares, narraban al de al lado sus primeras comidas y cenas navideñas y analizaban la carrera de Fórmula 1 que se iba a disputar justo al final del partido. Hamilton, Verstappen, el nuevo novio de la niña y las notas que va a traer el pequeño de la casa en la primera evaluación se mezclaban con los comentarios sobre el partido.
A todo se acostumbra uno, y también a ganar por decreto. A hacerlo con facilidad ante un rival netamente inferior que le puso empeño, ganas, intensidad y pasión, pero que tuvo poco que hacer ante la clara superioridad técnica del Córdoba CF. Así que allá por la hora de partido, con el cuarto gol, obra de Fuentes, todo el pescado estaba vendido. Los más pequeños abrían sus regalos y comparaban la suerte recibida con los amigos de grada. Los padres observaban la escena entre alegres y distraídos y la fiesta fue total con los primeros cánticos del ‘Volveremos a Segunda’.
[Así hemos vivido el Córdoba CF - Panadería Pulido en directo]
El Córdoba CF demostró, por enésima vez esta temporada en El Arcángel, que la Segunda RFEF se le queda muy pequeña. Que con meterle intensidad durante media hora y estando acertados arriba hay pocos o ningún rival que sea capaz de competirle un partido al completo en El Arcángel. Los más previsores, los más optimistas, ya miran de reojo a los primeros clasificados del resto de grupos de la categoría y a lo que hacen en los dos grupos de la Primera RFEF para hacerse una composición de lo que vendrá tras esta campaña. Lo que ha cambiado la cosa en este 2021. Un año que empezó con el equipo decepcionando una vez más a la sufrida infantería blanquiverde. Con una 2020-21 marcada por la pandemia del coronavirus, con El Arcángel cerrado al público, derrotas que se sucedían, entrenadores y directores generales que desfilaban por la puerta de salida y un proyecto tambaleante.
El año 2021 comenzó a tener mejor cara en verano. El director deportivo Juanito pergeñó una plantilla más joven, con hambre, ganas y calidad, y empezaron a llegar las victorias, una tras otra. El título de la Copa RFEF y la eliminatoria de Copa del Rey ante el Sevilla FC fueron la antesala de un mes de diciembre que ya huele a fiesta. Con el alumbrado en las calles de Córdoba, las atracciones en el Bulevar, los mercados navideños y la algarabía propia de estas fechas, el fútbol no se quiso quedar atrás. El broche de oro a un año 2021 que pasó de la sima a la cima en lo deportivo lo puso el Córdoba CF este domingo en El Arcángel. Jingle Bells, palmas, villancicos, regalos y muchas sonrisas. Que el 2022 traiga más felicidad al cordobesismo es la tarea del club y del equipo. Pero con partidos como el vivido ante el Panadería Pulido nada hace pensar que el mes mayo (o el de abril, quizás sea en marzo incluso) no acabe con miles de personas festejando en Las Tendillas un ascenso tan merecido como necesario.
