«No entiendo eso de irse al norte o a la costa todos los veranos. Nosotros la hacíamos en Los Villares y hasta mucho mejor, porque estábamos con la familia, en nuestro ambiente y hasta más controlados». Hace años, varios de los futbolistas de los 80 y los 90 comentaban lo extraño que les resultaba que la plantilla blanquiverde se marchara tan lejos de la ciudad para realizar el stage de pretemporada. De hecho, no hay pocos entrenadores que aseguran que esas concentraciones son «una de las mentiras del fútbol». El caso es que el Córdoba CF, en la actualidad, valora que el próximo verano la primera plantilla realice la concentración en la ciudad. En definitiva, que no haya concentración de pretemporada a varios cientos de kilómetros de El Arcángel. Al lógico ahorro económico se une la categoría en la que militará el conjunto cordobesista, en la que se adivina que, a priori, no muchos de ellos plantearán un verano lejos de sus domicilios habituales.

Hay que hacer memoria para intentar recordar la última vez que el Córdoba CF no realizó concentración de pretemporada fuera de la ciudad o en la costa. Sí se recuerda que en los albores del siglo XXI, con el conjunto blanquiverde recién ascendido a Segunda A, se realizó la concentración en Los Villares. Es decir, que los entrenamientos a primerísima hora del día se programaban en la sierra cordobesa y poco más.

Desde entonces, prácticamente dos décadas, el conjunto blanquiverde ha paseado cada verano por casi toda la geografía española. Desde Costa Ballena a Cabeza de Manzaneda, pasando por Nerja, Alicante o hasta Holanda, en aquel stage que se organizó en el verano del 2014 tras el ascenso a Primera División, el conjunto blanquiverde se ha pateado toda España.

Pretemporada del Córdoba CF en Belmez, en el verano del 82, cuando militaba en Segunda División A. CÓRDOBA

Dentro del entorno más cercano, tanto en los 70 como en los 80, también hubo pretemporadas pintorescas, como una realizada en Almodóvar u otra en Belmez, en el verano del 82, bajo las órdenes de Rajkov, con el conjunto blanquiverde militando en Segunda División A, aunque ya acuciado por los problemas económicos.

En este caso no parece que sea un asunto económico, sino más bien deportivo y de estar en consonancia con la categoría en la que se va a militar en la 21-22, aunque todo dependerá de los dirigentes deportivos del club y, sobre todo, del entrenador que tome la antorcha de dicho proyecto deportivo, que pasará, ineludiblemente, por la que lograr el ascenso por la vía rápida.

No dejaría de ser un contraste con respecto a lo ocurrido hace apenas un año. Con las limitaciones mayúsculas provocadas por la pandemia y a pesar de lo tardío del inicio de la competición, el club organizó, a falta de una, dos concentraciones de pretemporada. La primera fue en Torrox, localidad en la que dormía el equipo durante una semana, aunque entrenaba a media hora, en Nerja. Dos semanas después, un nuevo stage, en esta ocasión, en Montecastillo. Esta última concentración tuvo muchos más ingredientes para considerarse como tal y no tanto la primera, en tierras malagueñas, pero lo cierto es que el club puso todos los medios, incluidos los de las concentraciones para que la temporada tuviera un resultado muy diferente al que ha tenido finalmente, con el ya sabido descenso de categoría.

Por lo tanto, en el club se apunta que este verano podría ser parecido al de hace dos décadas o a imagen y semejanza de varios que hubo en los 90 y, sobre todo, en los 80. Sea en Los Villares o en alguna localidad cercana a modo de promoción, todo señala a que el Córdoba CF regresará a sus orígenes y los primeros planes de temporada los realizará en tierras cordobesas.