Buenas perspectivas para el ocio nocturno andaluz, que prevé igualar cifras de 2019

Los empresarios del ocio nocturno encaran la primera Navidad "normal" desde el inicio de la pandemia con buenas perspectivas de negocio en Andalucía, y confían en poder "igualar" al cierre de este año las cifras de facturación y empleo que tenían en 2019.

El presidente de la Federación Andalucía de Noche, Juan Rambla, ha afirmado a EFE que se espera una "buena" Navidad, ya que la de 2021 fue "un poco desastre" en el sector de salas de fiesta y discotecas, al haber coincidido con la ola de la variante ómicron de la covid-19.

Después de dos años en los que "no ha habido una Navidad real y normal", los empresarios esperan que "la gente retome el hábito de salir y vuelva con ganas" a sus establecimientos.

Para la Nochevieja, que es uno de los días de más negocio del sector, junto a los de verano, la oferta abarca desde las grandes fiestas de cotillón, a entradas con barra libre o con un número de copas determinado, aunque también hay locales -normalmente más pequeños- en los que solo se paga según se consuma.

Los jóvenes que quieren asegurarse ir a un determinado local son los que reservan con más antelación, pero en general los clientes "suelen esperar hasta la última hora", algo que también ocurre con los turistas, que entran en el sitio que han mirado en internet previamente o que les "atrae" por la calle, ha apuntado.

Respecto a la época prepandemia, ha observado una modificación del comportamiento respecto a los horarios: "la gente llega un poquito antes y la mayoría también se retira antes", mientras que el gasto medio, que hasta hace poco era superior, está "volviendo un poco a la normalidad", lo que ha achacado a la inflación.

En cuanto al aumento de los costes, Rambla ha dicho que "no se puede repercutir todo lo que está subiendo porque se dispararía el precio de las copas de una forma bestial", por lo que una parte del encarecimiento la asume el empresariado "a costa de perder margen de beneficio.

La patronal andaluza de locales de ocio espera que 2022 suponga la vuelta a las cifras de 2019, pese al "hándicap" de los primeros meses de este año, en los que la afluencia a los establecimientos se vio afectada por la pandemia, de manera que "no fue hasta marzo cuando la cosa empezó a tomar un poco de normalidad", ha recordado.

En cuanto al empleo, ha asegurado que se ha recuperado en líneas generales en pubs, salas de fiesta y discotecas, que en muchos casos han "cambiado de manos" recientemente porque ha habido empresas que "no han podido resistir estos años tan duros".

Para 2023, el presidente de Andalucía de Noche se muestra prudente porque los empresarios lo afrontan "con la incógnita de ver cómo evoluciona la situación, ya que la economía manda".

"Comer tienes que comer, pagar la casa, el agua, la luz, y ya si te sobra te planteas salir a cenar o salir de copas", ha referido Rambla, quien ha incidido en que "esto es una rueda y cuando se produce un pinchazo en un sector, va dando vueltas y nos llega a todos".

Sobre los botellones, ha indicado que "sigue habiente gente que se reúne" para beber, pero "de forma más escondida", y ha añadido que, en líneas generales, el concepto que existía de un encuentro "masificado, con miles de personas, se puede dar en un día puntual, pero por regla general ha bajado de forma importante".

Por otro lado, sobre los pinchazos en discotecas que causaron alarma este verano, Juan Rambla ha asegurado que "fue más el ruido que otra cosa, y se comprobó que realmente no había temas de drogas".