Cientos de empleados públicos de las ocho provincias andaluzas se han concentrado este miércoles ante la sede de la Delegación del Gobierno, en Sevilla, en protesta por la pérdida de poder adquisitivo, y han exigido al Ministerio de Hacienda y Función Pública que "se siente ya a negociar".

La concentración, convocada por el sindicato CSIF Andalucía y en la que ha participado su presidente, Germán Girela, se ha celebrado este mediodía de forma simultánea a las concentraciones convocadas por el sindicato frente al Ministerio de Hacienda y Función Pública y en las delegaciones del Gobierno de las distintas comunidades autónomas.

Tras las concentraciones provinciales llevadas a cabo el pasado 25 de mayo, la CSIF convocó esta movilización para "visibilizar el deterioro" de las condiciones laborales y retributivas de los empleados públicos y reivindicar una prestación de servicios públicos de calidad a la ciudadanía.

De esta forma, pretenden trasladar a la opinión pública los "recortes" que este colectivo acumula desde hace más de una década, con una merma del poder adquisitivo que será de un 20 por ciento a finales del 2022 respecto al 2010, según el sindicato.

A juicio de la organización sindical, hay que asegurar que los servidores públicos sean retribuidos con unos salarios dignos que se correspondan con la realidad y con el momento económico actual, de manera que se ponga fin a dicha pérdida de poder adquisitivo y se establezcan los mecanismos oportunos para que no vuelva a producirse en el futuro.

Junto a la pérdida de poder adquisitivo, otro de los problemas que afecta a los empleados públicos es la alta temporalidad en las administraciones públicas, que en el caso de Andalucía se sitúa en el 29,2 por ciento, según los últimos datos de la Encuesta de Población Activa (EPA).

El envejecimiento de las plantillas, derivado de las insuficientes ofertas de empleo público, es otra de las cuestiones que denuncia la CSIF, que insiste en la necesidad de una renovación generacional.