El presidente de la Junta de Andalucía y del PP-A, Juanma Moreno, aludió este lunes al «cúmulo de circunstancias» para la salida de Pablo Casado de la presidencia nacional del partido, entre ellas que su equipo «no era el que más sintonizaba con las estructuras territoriales», unido a las acusaciones a «uno de los grandes activos», Isabel Díaz Ayuso.

Moreno, en dos entrevistas en la Cope y la Ser con motivo del Día de Andalucía, dijo que todo ese «cóctel» produjo «una sacudida enorme» y una ruptura con las bases del partido y la sociedad, lo que llevó al PP a un proceso de «convulsión interna».

Además, opinó que lo ocurrido «no es responsabilidad nunca de una sola persona» e indicó que «hay quizás una falta de un entorno, de un equipo, lo suficientemente sólido en este proyecto, que «deteriora la imagen interna» del partido y que «provoca una especie de desconexión» de la dirección nacional con las territoriales.

Explicó que ese «malestar» no era nuevo, que ya se conocía, pero a él se añadió el «choque» con «uno de los grandes activos del partido» tras las acusaciones a Díaz Ayuso.

El papel de García Egea

Al ser preguntado sobre si estaba señalando al ex secretario general Teodoro García Egea, respondió que «nunca es una sola persona, sino un cúmulo», pero insistió en que sí notaron esa «desconexión» y que, en un partido que es «autonomista», cree que «esa sensación no se había interpretado bien por la dirección».

Sobre las explicaciones que ha dado Díaz Ayuso, aludió a la presunción de inocencia y dijo que él no tiene ahora ningún elemento para no confiar en la presidenta madrileña. Por lo que ha visto, sus explicaciones le parecen «suficientes», aunque recordó que quien debe tenerlas es la Fiscalía para ver si hay indicio de delito o no: «Yo no soy juez», agregó.

La intención del partido es que el congreso extraordinario se celebre en Sevilla pero Moreno avisa: «Yo he dicho que si el congreso es tranquilito los acojo de par en par, ahora, si vienen a liarla los mando a Santiago de Compostela».

Moreno, que le dijo personalmente a Alberto Núñez Feijóo que él es la solución, está convencido de que el presidente gallego sabe que «el partido y España lo necesita» y que cuando se convoque el congreso oficialmente dará «el paso».

El presidente andaluz es partidario de que solo haya una candidatura en ese congreso, aunque está seguro de que si se presentan otras ganará igualmente Feijóo.