La Consejería de Igualdad aprobó el nuevo Plan General de Inspección de los Servicios Sociales para los años 2022 y 2023, un documento que abarca actuaciones en todos los sectores, con especial incidencia en centros residenciales de personas mayores y personas con discapacidad. Este plan, que fue publicado hace unos días en el Boletín Oficial de la Junta (BOJA), no solo es un medio de comprobación del cumplimiento de la normativa vigente, sino también de orientación y actuaciones para la mejora en la atención asistencial que deben recibir las personas usuarias del sistema.

Según informó la Consejería de Igualdad en un comunicado, debido a la diversidad de centros, servicios y prestaciones, el documento establece cuatro líneas de actuación para los años 2022 y 2023.

La primera de ellas hace referencia a las actuaciones para contribuir al buen funcionamiento del sistema, entre las que destacan las visitas de inspección a los centros para comprobar la atención asistencial prestada y el grado de cumplimiento de requisitos materiales y funcionales, y los estudios de ratio de personal.

La segunda línea incluye medidas para garantizar los derechos de los usuarios de entidades y centros de servicios sociales, así como su bienestar físico y emocional y desarrollo personal.

La tercera se ocupará de promover la mejora continua del nivel de calidad en la prestación de los servicios sociales en Andalucía, para lo que resulta clave impulsar la implantación de protocolos y registros, o conocer las opiniones, sugerencias y necesidades tanto de usuarios y familiares como del personal de los centros.

Finalmente, la cuarta línea recoge actualizaciones para la mejora continua de la Inspección de Servicios Sociales basadas en la formación, coordinación, el establecimiento de alianzas y la cooperación.