La expresidenta de la Junta de Andalucía, Susana Díaz, dijo este viernes, durante su comparecencia ante la comisión de investigación de la Fundación Andaluza Fondo de Formación y Empleo (Faffe), que no puede «aportar nada» sobre la misma. «Los hechos que se investigan no son coincidentes con los cargos institucionales que he tenido en el Gobierno de Andalucía, que se inician en mayo del 2012, con mi nombramiento como consejera de la Presidencia, y en años posteriores, de septiembre del 2013 a enero del 2019, como presidenta de la Junta», recordó Díaz antes de remarcar que la Faffe, que se creó en 2003, se extinguió en 2011.

La comisión, creada con el apoyo de todos los grupos y a petición del Gobierno andaluz de coalición de PP y Ciudadanos, tiene el objetivo de esclarecer y fijar las responsabilidades políticas de la irregularidades detectadas en la Faffe. Desde esta fundación se usaron ocho tarjetas de crédito en gastos por un importe de unos 32.000 euros en 12 fiestas en prostíbulos de las provincias de Sevilla, Cádiz y Córdoba, según la Unidad Central Operativa (UCO) de la Guardia Civil. El PP estima que la Faffe tenía 150 millones en ayudas públicas sin justificar cuando fue liquidada en 2011.

Susana Díaz dijo que no puede aportar "nada nuevo" y que "todo el mundo sabe que yo no estaba cuando existía la Faffe"

Susana Díaz dijo que no puede aportar «nada nuevo» que no pudieran aportar los actuales miembros del Gobierno andaluz, que «tienen que tener la misma información que yo», por lo que apuntó la conveniencia de que la comisión los cite. «Todo el mundo sabe que yo no estaba cuando existía la Faffe; por ese criterio ¿por qué vengo yo y no los actuales miembros del gobierno?», se preguntó..

En su intervención subrayó que durante los años que ostentó cargos institucionales en la Junta trasladó siempre a sus colaboradores la necesidad de mantener «tolerancia cero» con cualquier irregularidad, de seguir un cumplimiento «estricto» de las normas y de remitir con «diligencia» a la Justicia cualquier irregularidad que se detectara.

Tanto al inicio como al final de su comparecencia, en la que a veces era ella la que hacía las preguntas, agradeció poder «reivindicar» los seis años que estuvo al frente de la Junta, periodo en el que dijo que su comportamiento fue «ejemplar».

Aunque se sometió a las preguntas de los portavoces parlamentarios, no respondió a las cuestiones concretas que le formulaban durante las casi tres horas que duró la comparecencia. La portavoz del PP, Vanessa García, sostuvo que está demostrado que hubo «nepotismo, enchufismo y ocultación» y que el Gobierno de Díaz no colaboró con la Justicia. «En el tiempo que transcurre desde que le saltó el escándalo hasta que empiezan a prescribir los expedientes de reintegro, dónde estaba usted», preguntó tras lamentar que había expedientes sin justificar por más de 100 millones de euros y decenas de informes advirtiendo de que iban a prescribir. «Usted solo habla de su etapa de presidenta», con lo que certifica «que sí hubo corrupción durante la etapa anterior», señaló.

La expresidenta de la junta de Andalucía asegura que siempre tuvo "tolerancia cero" con cualquier irregularidad

Liquidación en el año 2016

El portavoz de Ciudadanos, Juan de Dios Sánchez, insistió en que la Faffe se liquidó en 2016 aunque se extinguiera en 2011, y subrayó que la expresidenta se encontró con 3.000 expedientes sin tramitar, 30.000 becas sin abonar y 400 millones de reintegro en los cajones y que paralizó la formación profesional para el empleo. «Ha quedado de manifiesto que usted no hizo absolutamente nada para aclarar las irregularidades», concluyó el diputado naranja.

Por su parte, la portavoz de Vox, Ángela Mulas, la acusó de «mentir». Aseguró que con su intervención demostraba que el PSOE es «el partido más corrupto de Europa», lo que llevó a Díaz a recriminar al presidente de la comisión por no llamar la atención a la diputada de Vox.

También compareció el funcionario Teodoro Montes, testigo protegido en el caso de los cursos de formación, y dijo que la Faffe se creó «para trincar dinero y meter al que sobraba». Aseguró que «la cantidad de irregularidades en los cursos no tiene nombre» y que «muchísimos» cursos que recibieron subvenciones no se realizaron.