Es la serie que está en boca de todos, pero la popularidad de la ficción de Netflix ‘El juego del calamar’ entre niños en edad escolar ha disparado todas las alarmas en la comunidad educativa de Andalucía ante la proliferación de juegos en los patios de recreo que reproducen algunas de las escenas de la serie, de alto contenido violento.
Desde el estreno de ‘El juego del calamar’ el pasado mes de septiembre, raro es el día en que no se conoce algún episodio sobre el impacto de esta ficción en los centros educativos y no son pocos los docentes que se han hecho eco de este preocupante fenómeno a través de las redes sociales. Algunas de sus impresiones han llegado incluso a viralizarse, como es el caso del hilo planteado por ‘Piruleta de menta’ sobre el comportamiento de sus alumnos de 8 y 9 años en el patio de recreo.
Hablan los padres
Los últimos en mostrar su consternación ante la situación han sido los padres del alumnado andaluz. Así, la Confederación Andaluza de Asociaciones de Madres y Padres del Alumnado por la Educación Pública (Codapa) ha emitido un comunicado en el que, además de alertar de la situación, recuerda que la serie no es apta para menores de 16 años y que es responsabilidad de la familia el controlar los contenidos que ven los menores y que se puede hacer uso del control parental para evitar el acceso a este tipo de programas.
"Llevamos preocupados por los contenidos que ven en videojuegos y series los niños. Ahora ha salido 'El juego del calamar', pero en otro momento son series o programas que no son aptos y llevamos un tiempo preocupados", ha lamentado Maica Matillas, portavoz de Codapa, que también ha citado como problema en los menores el porno, que cada vez es visto a edades más tempranas.
A su juicio, los niños "no pueden ver una serie que tiene muchísima violencia" porque "no están preparados", algo que "lo advierte la gente que sabe: los expertos en educación, los pediatras, los psicólogos", etcétera.
¿Cómo afecta la violencia de El juego del calamar a nuestros hijos?
Los expertos advierten de que la exposición a contenidos como ‘El juego del calamar’ de alto contenido violento, así como otro tipo de series y videojuegos, a edades muy tempranas tienen un impacto directo en la psicología de los menores, que se pueden volver insensibles a la violencia.
Asimismo apuntan a que los niños aprenden e imitan las conductas que ven a su alrededor. No saben cómo comportarse, no saben cómo actuar en la sociedad, por lo que toman como referencia a sus padres, a sus amigos, profesores, pero también a aquello que ven en las pantallas. De ahí la responsabilidad de las familias y la escuela de crear referentes sanos en los que puedan reflejarse.
¿Cómo evitar que los niños vean El juego del calamar?
La popularidad que ha adquirido la serie ha llevado a que muchos niños demanden a los padres su visionado. Para evitar el acceso al contenido violento, se recomienda activar el control parental de Netflix, evitar que los niños vean la televisión o dispositivos móviles sin supervisión de sus padres, respetar las recomendaciones de edad e interesarse por los gustos de los hijos para plantearles alternativas saludables.
