El presidente de la Junta de Andalucía, Juanma Moreno, ha pedido a las autoridades judiciales y al Gobierno que den «un marco legal suficiente» para poder tener «instrumentos a la hora de actuar» con trabajadores de residencias de mayores o sociosanitarios que se niegan a vacunarse.

En este sentido, cabe recordar que el Tribunal Superior de Justicia de Andalucía (TSJA) ha acordado la suspensión cautelar de la medida acordada por la Junta para imponer la realización de pruebas diagnósticas periódicas a todos los trabajadores de residencias de mayores y en centros sanitarios y sociosanitarios.

A pregunta de los periodistas sobre los brotes producidos en varias residencias de mayores de Andalucía, Moreno recordó que fueron los primeros en recibir las vacunas y señaló que ha habido cierto rebrote, «sobre todo, por una parte del personal que tiene trato directo con los mayores y que se niegan a vacunarse».

El presidente de la Junta recordó que no pueden obligar a una persona a vacunarse, por lo que pidieron al TSJA que se pueda «al menos obligar a que se tengan que hacer un chequeo diario, una prueba diagnóstica todos los días que van a trabajar».

«Nos dicen muchos directores de residencias que nos encontramos con una situación imposible, con personas que no se quieren vacunar, evidentemente no se pueden despedir, no se pueden trasladar de trabajo y no se quieren hacer una prueba directa todos los días, pero que sin embargo están tratando directamente con las personas mayores», argumentó.

Moreno recordó que «Francia ha tomado la decisión de la obligatoriedad de vacunarse a todos los que trabajen con mayores», y añadió que «España tendrá que tomar una decisión, y si no se puede obligar a vacunar, al menos que tengamos la capacidad de que ese trabajador sea desplazado a otra función o que se tenga que hacer una prueba diagnóstica permanente».

«Las residencias están muy blindadas, todos los mayores están vacunados, pero si por allí transitan personas no vacunadas se puede crear un problema», incidió el presidente de la Junta.

Además, recordó que se va a hacer también un diagnóstico permanente de cero-prevalencia para comprobar si hiciera falta poner una tercera dosis en el caso de que ese estudio indique de una manera fehaciente que es necesario. «Vamos a ver el nivel de inmunidad que mantienen los mayores. Vamos a estar muy pendientes de las residencias de mayores», concluyó.

Vacunación a menores

Por su lado, el vicepresidente de la Junta y consejero de Turismo, Regeneración, Justicia y Administración Local, Juan Marín, señaló ayer que «lo que se prevé» en Andalucía es organizar la vacunación voluntaria frente a la Covid-19 de niños menores de doce años en sus propios centros escolares, evitando así que se tengan que desplazar a otros lugares para ello.

Así lo expuso en durante la inauguración del curso escolar en Coria del Río (Sevilla), donde el vicepresidente de la Junta confirmó que la Administración andaluza ya tiene «en el calendario la agenda preparada para la vacunación de los niños de cero a doce años».

Ha concretado que «estamos preparados para poder empezar» con la vacunación entre estas edades «a partir de finales de octubre», y puso de relieve que «estamos especialmente acelerando todo lo que podemos» la vacunación entre el colectivo de menores de doce a 16 años de edad para que «más del 70 o 75 por ciento» de los alumnos de esa franja «estén vacunados cuando el próximo día 15 de septiembre» empiece el curso de Secundaria. Indicó que, «lo que se prevé es que se vacune en los centros» educativos a los menores de 12 años, de modo que «no se tengan que desplazar los alumnos ni las familias» a ningún sitio.