La diseñadora cordobesa Juana Martín ha dado las gracias al tribunal que durante el último mes la ha estado enjuiciando por las ayudas que recibió de la sociedad pública Invercaria, por importe de 850.000 euros, después de que su defensa haya insistido en pedir su absolución.

La Sección Primera de la Audiencia Provincial de Sevilla ha dejado este viernes visto para sentencia el juicio contra la modista cordobesa, para quien la Fiscalía Anticorrupción pide cinco años y medio de cárcel por prevaricación y malversación, mientras que la agencia Idea, socia única de Invercaria, solicita ocho años.

El Ministerio Público también reclama ocho años para el expresidente de Invercaria Tomás Pérez-Sauquillo, seis y medio para el exdirector de Promoción Cristóbal Cantos y seis años y un día para el exdirector financiero Antonio Nieto.

En el ejercicio de su derecho a la última palabra, la diseñadora ha agradecido a los tres jueces el trato que le dispensaron al eximirla de acudir a gran parte de las doce sesiones que ha tenido el juicio para así dedicarse a su negocio y al cuidado de su bebé, según han informado fuentes judiciales a Efe.

Antes, su abogada ha recordado que fue la Junta de Andalucía la que se dirigió a Juana Martín "al ver su éxito en la Pasarela Cibeles" de 2005, cuando se convirtió en la "primera andaluza, cordobesa y gitana" en desfilar allí.

También ha reconocido que había sido autónoma hasta su alianza con Invercaria y que esta sociedad de capital riesgo en efecto "asumió la tutela minuciosa" de la empresa que nació como fruto de esa unión.

Todos los préstamos que Juana Martín consiguió entre 2006 y 2011, según su letrada, "fueron aplicados a las inversiones relativas al proyecto Juana Martín Andalucía", tal como estaban "previstas en el plan de negocio elaborado por Invercaria", al contrario de lo que asegura Anticorrupción.

De hecho, la abogada Dolores Moreno ha recordado que, según los peritos, ni Juana Martín ni sus familiares se enriquecieron gracias a esas ayudas públicas y que su cliente, "con gran esfuerzo y sacrificio", pudo salir adelante a pesar de la crisis, hasta el punto de que "ha vestido a grandes estrellas, como Sharon Stone".

El abogado de Cantos, José María Calero, también ha lamentado que el fiscal "prescinda de una figura como la de Juana Martín", a la que ha definido como "un diamante en bruto".

"No se fijaron en ella por casualidad, todo el mundo la conoce", ha continuado el exfiscal, quien ha afirmado que "no hubo ni decisión arbitraria" en la elección de la modista "ni sustracción de fondos".

En cuanto a su cliente, en la fecha de los hechos "era un crío que empezaba a trabajar", así que "por qué va a querer cometer delitos graves e ir a la cárcel, si está comenzando su carrera", se ha preguntado.

En el mismo sentido, ha recordado que Cantos acudió al juzgado a denunciar "cuando en Invercaria le dieron una instrucción que consideró que no era correcta".

El único acusado que se ha explayado en el turno de última palabra ha sido Pérez-Sauquillo, quien ha reiterado que "todavía" no sabe "qué delitos" se le atribuyen a pesar de tantos años de investigación porque "no ha habido ni sustracción, ni desvío de fondos públicos ni ánimo de lucro".

También ha criticado a la agencia Idea, acusadora en esta causa, porque "casi todos sus altos cargos estaban en el consejo de administración de Invercaria".