La presidenta del grupo parlamentario de Adelante Andalucía, Teresa Rodríguez, ha criticado este viernes el discurso "demasiado autocomplaciente" de la presidenta del Parlamento, Marta Bosquet, ya que 40 años después del 28F "seguimos con tareas pendientes", pero también con "nuevas amenazas".

En declaraciones a los periodistas tras finalizar el Pleno Institucional en conmemoración del Día de Andalucía, Rodríguez ha señalado que los representantes del pueblo andaluz tienen "tareas pendientes desde hace 40 años" relacionadas con la necesidad de cambio del modelo productivo que "garantice que nuestros hijos no tienen que volver a emigrar".

Así, ha criticado que el modelo andaluz, "subordinado económicamente y con la misma brecha de hace 40 años", se manifiesta "en sus aspectos más dolorosos", en concreto, ha detallado "los 2.300 camiones del vertedero de Zaldívar que amenaza con venir a Nerva (Huelva) para "enterrar sus residuos más peligrosos" o se propone El Cabril (Córdoba) para una nueva ampliación que acoja los residuos nucleares de las centrales en desmantelamiento de España.

De esta manera, ha rechazado "el papel subordinado" de Andalucía, que pone "a disposición del modelo productivo nuestro medio natural, los jóvenes y el empleo precario".

De igual manera, también ha llamado la atención sobre las "nuevas amenazas" que caen sobre Andalucía. "Cuando creíamos consolidados nuestros sistemas educativo, sanitario y la igualdad de hombres y mujeres se ponen en riego por un gobierno de derechas que amenaza con la privatización de estos servicios y con hacer tambalear el sistema en defensa de igualdad y violencia machista".

Ante esta situación, Rodríguez ha llamado a estar "en guardia, alzar la voz y salir a las calles", por lo que tras el acto del Parlamento participan en las Marchas de la Dignidad convocadas por organizaciones, colectivos y movimientos sociales.

Por su parte, la portavoz de Adelante Andalucía, Inmaculada Nieto, aunque ha señalado que la presidenta del Parlamento se ha "detenido con cuidado" en elementos en los que el Gobierno "suele pasar de puntillas para no desestabilizar el equilibrio que tiene con extrema derecha", como es la igualdad o la violencia machista, ha criticado que haya sido un discurso "plagado de lugares comunes".