El pleno del Parlamento de Andalucía ha aprobado hoy los presupuestos de la Junta de 2017, que ascienden a 33.239,5 millones de euros, con el apoyo de PSOE y Ciudadanos, ya que estos partidos cerraron por segundo año consecutivo un acuerdo sobre las cuentas, que han sido rechazadas por PP, Podemos e IU.Los presupuestos andaluces, los segundos del actual Gobierno de la socialista Susana Díaz, destinan más de 4.000 millones al pago de la deuda, incrementan su gasto no financiero en un 2,8 % hasta los 29.477,7 millones y aumentan la inversión pública un 10,3 % para alcanzar un total de 3.668,14 millones.

Las cuentas andaluzas no han incorporado ninguna enmienda de las 934 que se han debatido entre ayer y hoy en el Parlamento autonómico, presentadas por PP, Podemos e IU, ya que PSOE y Ciudadanos las han rechazado todas.

El presupuesto autonómico plantea la creación de 85.000 puestos de trabajo, de los que 20.000 serán producto de la acción directa de los planes autonómicos en la materia, y tiene como prioridades el impulso de la actividad económica, dotar de mayor capacidad económica a la clase media trabajadora y blindar los servicios públicos, según defiende el Gobierno andaluz.

PP y Podemos han intercambiado abstenciones en sus enmiendas, hasta el punto de no rechazar ninguna de la otra formación, mientras que Podemos e IU se han apoyado mutuamente todas las enmiendas.

La consejera andaluza de Hacienda y Administración Pública, María Jesús Montero, ha defendido que las cuentas buscan "afianzar" la recuperación económica y el crecimiento en Andalucía, para que los ciudadanos de la comunidad lo noten "en primera persona".

Los portavoces parlamentarios de PP, Podemos e IU han rechazado los presupuestos por ser "regresivos" y "no revertir los recortes en educación y sanidad", además de "ahondar en la desigualdad de los andaluces con respecto al resto de españoles".

Por su parte PSOE y Ciudadanos han defendido el acuerdo alcanzado entre ambos para sacar adelante el proyecto de ley y han criticado a los demás partidos por "no haber contribuido" a su aprobación y no "arrimar el hombro".