Las comunidades autónomas dispondrán en 2016 de 7.462 millones de euros más que este año, pero tendrán que reducir su déficit al 0,3% del PIB después de que el ministro de Hacienda, Cristóbal Montoro, se haya negado a flexibilizar esos objetivos como le demandaban diez autonomías. Finalmente, el Consejo de Política Fiscal y Financiera (CPFF) ha aprobado gracias a la mayoría cualificada del Gobierno central que todas y cada una de las comunidades cierren 2016 con un máximo de 0,3% de déficit, 2017 con un 0,1% y 2018 en equilibrio presupuestario.

Diez comunidades --las siete gobernadas por el PSOE, además de Cantabria, Canarias y Cataluña-- votaron en contra de esos objetivos y reclamaron al ministro un reparto más equitativo y justo de los esfuerzos. "No oigo más que lamentos. Póngase a trabajar y deje de quejarse ya; deje ya de lamentarse y haga un programa de medidas", les contestó el responsable Hacienda, quien dejó claro que la senda de la reducción del déficit es irrenunciable para el Ejecutivo.

AUTORIDAD INDEPENDIENTE Respecto a las recomendaciones que arrojó la Autoridad Independiente de Responsabilidad Fiscal (Airef) de que el Gobierno permitiera distintos objetivos de déficit para cada autonomía, Montoro respondió que en este momento no ve viable exigir más a aquellas que están cumpliendo, llevarlas al superávit, para compensar a las que están detrás.

De esta manera, Montoro explicó que la Airef cumple su función de advertir de que hay cinco comunidades que tienen difícil el cumplimiento del déficit, pero ahora "no ve pertinente" aceptar objetivos diferenciados, "y menos cuando hay una nueva dotación presupuestaria de un punto del PIB".

El ministerio cifra esa dotación en 10.000 millones de euros, pues suma los 7.462,8 millones de financiación adicional a unos 2.900 millones que las autonomías ahorrarán en intereses gracias a los mecanismos dispuestos por el ministerio, con créditos a un interés del tipo 0.

De los casi 7.500 millones adicionales que llegarán a las autonomías como consecuencia del incremento de las entregas a cuenta y de la liquidación del año 2014, las más beneficiadas serán Cataluña, la Comunidad Valenciana y Andalucía. En ambos casos su financiación crecerá por encima del 10%, pero el ministro dejó claro que ese dinero irá destinado a reducir el déficit y que en ningún caso podrán destinarlo a aumentar el gasto.

Los consejeros de las comunidades que no gobierna el PP han reprochado al ministro que priorice la reducción del déficit al bienestar de las personas, pero Montoro ha rebatido que la única manera de garantizar la sostenibilidad de los servicios sociales es controlar las cuentas públicas.

De las 14 comunidades que debían presentar planes de ajuste por haber incumplido en 2014 los objetivos de estabilidad (todas menos Navarra, Galicia y Canarias), sólo lo han hecho Asturias, Castilla y León, Madrid, Murcia, La Rioja y Cataluña y sólo se ha aprobado el último de ellos. El resto quedan pendientes, explicó Montoro, pues el ministerio es consciente de "las circunstancias excepcionales" que concurren este año debido a las elecciones de mayo y a los consiguientes cambios de Gobierno. Por otra parte, el Gobierno ha informado de la reordenación del sector público a fecha de 1 de enero de 2015, que muestra que las comunidades han reducido 754 entidades, el 32% de las que tenían hace cinco años.

AJUSTE DE CATALUÑA El CPFF aprobó ayer tan solo el plan económico-financiero de Cataluña, que además será la comunidad que reciba un mayor incremento de la financiación en 2016, con 1.861,8 millones de euros más, un aumento del 12%. Cristóbal Montoro explicó que el plan de ajuste de Cataluña compromete la reducción del déficit público al 0,3% en 2016 y ha sido el único considerado "completo e idóneo".