La investidura de la candidata socialista a la Presidencia andaluza, Susana Díaz, parece tener el camino más "allanado" después de que el expresidente José Antonio Griñán haya anunciado que dejará la política y que desde el PSOE se dé por hecho que su antecesor, Manuel Chaves, no repetirá como diputado.

Las nuevas formaciones que obtuvieron representación en las elecciones andaluzas del 22 de marzo se han hecho eco de la situación generada y mientras el líder de Podemos, Pablo Iglesias, indicó ayer que "cuando la gente se mueve convierte en fácil lo que parecía imposible", el presidente de Ciudadanos, Albert Rivera, ha constatado que hay "movimientos" dentro del PSOE.

La secretaria general de Podemos en Andalucía, Teresa Rodríguez, ha sostenido que las "renuncias diferidas" de los expresidentes de la Junta son "consecuencia directa" de las exigencias de su formación, que ha arrancado "victorias para la limpieza de la vida política".

"Esta primera victoria nos alienta aún más a remarcar con fuerza las otras dos condiciones que hemos puesto sobre la mesa", ha dicho en alusión a la supresión de altos cargos que permita contratar a personal en los servicios públicos y a que la Junta no suscriba convenios con entidades financieras que realicen desahucios.

La dirigente de Podemos ha recalcado que su formación, que obtuvo quince escaños, mantiene "con firmeza" estas dos condiciones para facilitar la investidura de la socialista Susana Díaz como presidenta de la Junta.

Desde Barcelona, el presidente de Ciudadanos, Albert Rivera, ha considerado que con la renuncia de Griñán el PSOE "ha movido ficha" aunque ha insistido en que cualquier negociación pasa por la salida de éste y de Manuel Chaves y por la firma de un pacto anticorrupción, una propuesta que según ha asegurado "están mirando" los socialistas para negociar cualquier eventual acuerdo. El portavoz del grupo parlamentario de Ciudadanos (C's), Juan Marín, ha negado por su parte que su formación haya tenido un acercamiento con el PSOE-A de cara a la posible investidura de Susana Díaz, a la par que ha asegurado que la posición de su partido sigue siendo el 'no' porque "no ha cambiado nada".

Por su parte, el candidato de Izquierda Unida (IU) a la Presidencia del Gobierno de España, Alberto Garzón, ha opinado que, "por responsabilidad política", Chaves y Griñán deben "dejar ahora mismo el escaño y no esperar a las próximas elecciones".

En Andalucía, su coordinador general, Antonio Maíllo, ha afirmado que el PSOE "debe retratarse con un cambio de sus relaciones en política" en la comunidad y ha reclamado "diálogo" porque "los tiempos de su mayoría absoluta ya se acabaron". Ha reiterado que IU, que cuenta con cinco diputados, dedicará la próxima legislatura a hacer "oposición de izquierdas" por la "falta de credibilidad" de la presidenta en funciones de la Junta, Susana Díaz, que cree que formará Gobierno tras un acuerdo con Ciudadanos.

Fuentes socialistas han asegurado a Efe que seguirán manteniendo contactos con todas las formaciones políticas para la investidura y han anunciado que el próximo lunes se reunirán con el PP antes de la ronda de consultas que llevará a cabo el presidente del Parlamento.