Si para los socialistas, la Operación Heracles aleja la culpa de los despachos de la Junta, para los populares es lo contrario. El secretario general del PP-A aseguró ayer que "hay dudas razonables" sobre la relación entre los detenidos e imputados en esta operación y el PSOE-A, aunque Sanz eludió desvelar nombres. El número dos del PP-A preguntó públicamente al presidente José Antonio Griñán si algún miembro de esta "organización criminal" ha estado afiliado al PSOE, si alguno ha pertenecido a la Ejecutiva del PSOE de Sevilla, si alguno "ha frecuentado" la sede provincial del partido en Sevilla o la sede regional del PSOE-A en San Vicente, si alguno ha estado en "algún despacho de algún dirigente del PSOE-A", o en el del "presidente provincial del PSOE de Sevilla y presidente de la Diputación" y, por último, si "esta organización criminal ha servido para ganar elecciones en algún municipio de la provincia de Sevilla o en algún otro municipio de Andalucía", ya que el "70% de las ayudas han ido a la Sierra Norte" de la provincia hispalense.