La vicesecretaria de Territorio, Medio Ambiente y Asuntos Europeos del PP-A, Alicia Martínez, criticó ayer que la propia Junta, por boca de la secretaria general de Vivienda, Amanda Meyer (IU), haya admitido el "fracaso" del Plan Concertado de Vivienda 2008-2012. El PP exige que las VPO que en estos momentos están "vacías y cerradas" sean para las familias que tienen más dificultades o están a las puertas de un desahucio.

"No puede haber ni una familia en la calle mientras haya viviendas cerradas del parque social de viviendas de la Junta", advirtió ayer en rueda de prensa la popular. Sin concretar la cifra, aseguró que ese "número importante" de viviendas "cerradas y vacías deberían dar solución a los desahucios" en la comunidad.

Martínez, que hizo un balance del Plan Concertado de Vivienda y Suelo 2008-2012, también arremetió contra Meyer por unas declaraciones en las que admitió que este programa "nació fracasado" porque sus objetivos "no respondían a las necesidades reales de la población".

La explosión de la burbuja inmobiliaria es el principal motivo de que de las 132.000 construcciones previstas solo se hayan terminado finalmente 44.391, es decir, un 33%, siendo la mayoría de ellas para venta y no para el alquiler.