Es la segunda vez en dos meses que el Alto Tribunal andaluz se dirige a la Junta para preguntarle por qué aún no ha tomado las medidas oportunas para recuperar el paraje de El Algarrobico (Almería), ocupado desde 2003 por las obras paralizadas de un macrohotel de 20 plantas. El Tribunal Superior de Justicia de Andalucía (TSJA) ha enviado una nueva providencia instando a la Junta a "ejecutar las resoluciones judiciales" que le obligan a modificar el Plan de Ordenación de Recursos Naturales (PORN) del parque natural de Cabo de Gata-Níjar (Almería), con el objeto de "restablecer" el nivel de protección ambiental del que gozaba El Algarrobico en 1994 como "espacio protegido no urbanizable".

La providencia del TSJA reclama al Gobierno andaluz que dé cumplimiento a una sentencia del Supremo, de septiembre de 2011, que suspendió cautelarmente y de forma parcial el PORN, aprobado por la Junta en 2008. Según el fallo, la norma era "ambigua" y no impediría que se terminase de construir el macrohotel, cuyas obras están paralizadas desde que se inició el litigio judicial. El litigio se inició a partir de la denuncia de los ecologistas de Greenpeace, que ayer insistieron en que el segundo toque de atención del TSJA pone a la Junta "contra las cuerdas". La segunda providencia del Alto Tribunal reincide en los mismos argumentos que la anterior, fechada en febrero. Los jueces consideran que la documentación que remitió la Junta entonces no da respuesta al requerimiento judicial en la que instó a cumplir el fallo del Supremo. En esta ocasión, el tribunal requiere de manera única y directa a la Consejería de Medio Ambiente para que proceda a otorgar a El Algarrobico la consideración de "espacio protegido no urbanizable".

ALCANCE LIMITADO Sin embargo, la reacción de Medio Ambiente ha sido más o menos la misma que en febrero. El departamento de José Juan Díaz Trillo argumenta que, como la situación del paraje "aún se halla pendiente de sentencia definitiva" en varios procesos judiciales y como no existen fallos en firme, la Junta tiene "muy limitadas" las posibilidades de actuación "en sentido positivo". El Gobierno andaluz respondió al TSJA que, "salvo error por nuestra parte", el auto que suspendía la normativa del 2008 tiene "un alcance y contenido meramente negativo". Es decir, que la Junta tiene que asumir por mandato judicial una vuelta a la planificación ambiental antigua de la zona costera, pero aun admitiendo ese cambio, todavía no puede proceder a actuar sobre el medio y ejecutar el derribo del macrohotel. No hasta que una sentencia judicial se lo ordene explícitamente.

Para sustentar sus argumentos, la consejería remitió dos informes suscritos por la delegación provincial de Medio Ambiente en Almería y la dirección general de Espacios Naturales y Participación ciudadana. La Junta también adjuntó la copia en el BOJA del protocolo firmado por el antiguo Ministerio de Medio Ambiente y el Gobierno andaluz para proceder a la demolición del macrohotel y a la recuperación de la playa en cuanto haya una sentencia firme. "Es pública y notoria la voluntad de la Consejería de Medio Ambiente de lograr finalmente la regeneración del lugar denominado El Algarrobico y, para ello, ha ejercido el derecho de retracto y emprendido las acciones legales oportunas por parte del gabinete jurídico", advierte el informe, en el que se hace referencia al protocolo suscrito con el Gobierno central antes de las elecciones generales. En el 2001, la constructora Azata solicitó al Ayuntamiento de Carboneras licencia para levantar un hotel de 20 plantas y 411 habitaciones en la playa natural de El Algarrobico. Las obras arrancan en el 2003, un juez las paraliza en el 2005 y la Junta expropia los terrenos un año después.