--La obra pública es la gran damnificada de los gobiernos. ¿Qué efectos tendrán estos recortes?

--El principal efecto, que es el paro, ya lo estamos sufriendo. En nuestro colectivo, que nunca ha tenido problemas de empleo, está ya en el 10%. Somos unos 3.500 colegiados en Andalucía, Ceuta y Melilla. Para que se haga una idea, de las dos últimas promociones en España, el 90% no ha trabajado nunca en este sector. Teniendo en cuenta que un técnico le cuesta al Estado alrededor de 70.000 euros, además de lo que paga el padre por la formación, imagínese la consecuencia que eso conlleva. Lo que está haciendo el sector es salir fuera, pero no es la gran solución. En Andalucía se han ido al extranjero 30 o 40 ingenieros porque tampoco las empresas salen fuera y ni se llevan a los técnicos. El resto está aquí y en paro. Y los profesionales libres no cuentan en ese 10%, por lo que la cifra es mucho mayor.

--La inversión pública de la Junta se ha desplomado un 41% desde el 2009. También la de Fomento ha caído en picado. ¿Qué opina de ello?

--Nos estamos cargando un sector del que España y Andalucía se pueden sentir orgulloso. Si dejamos de invertir, dejaremos de estar a la cabeza mundial en ingeniería civil y, lo que es más importante, seguiremos sufriendo altas cifras de paro.

--En el último Presupuesto andaluz, la Junta ha sacrificado aún más la inversión para blindar los servicios sociales.

-(Interrumpe) Tanto se quiere decir que no se van a hacer recortes sociales, que indirectamente se están haciendo para el futuro. Habría que acordarse cuando de Sevilla a Granada se tardaban cuatro horas y media en coche y todos parábamos a comprar mantecados en Estepa y pasábamos por aquella cuesta de Archidona, donde vomitaban los niños. Ahora a Granada llegas en dos horas y media. Tardar tanto tiempo es un recorte social. Que no se hagan depuradoras, también es un recorte social. La UE obliga en 2015 a que todas las aguas estén depuradas. Pero la principal consecuencia social es el paro. Tenemos cinco millones en este país. Si al sector de la construcción se le hubiera inyectado una parte de lo que se dio a los bancos para nada, el paro en España sería de 700.000 personas menos.

--¿Cree entonces que la Junta se equivoca priorizando lo social a costa de la obra pública?

--Se equivoca y a la larga veremos que es así. Sé que hay personas dentro del Gobierno que piensan que hay que invertir en construcción porque si no el paro seguirá creciendo. Es un error, pero es la política fácil. Cuando en casa hay menos dinero no se hacen obras o nos damos de baja de Canal Plus. Pero si no haces reformas en casa, a la larga da la cara, y aquí va a pasar y tendremos problemas.

--¿Son las infraestructuras las grandes olvidadas de los gobiernos?

--Sin duda, pero, como ya he dicho, recortar ahí es la política fácil. Lo consideran gasto y no inversión. Creo que hay mucho gasto superfluo en las administraciones que nadie se ha atrevido a recortar. Se está yendo al duro y no a la peseta, que está en miles de cosas. Es verdad que se han hecho muchas obras y que no todas han sido adecuadas. Muchas han salido por decisiones políticas, como los tranvías o metros. Pero no todo puede recaer sobre la construcción. La construcción no puede ser la maldita de este país. La prueba está en que si no hay construcción, va a ser muy difícil que el paro baje en este país.

--El Plan de Infraestructuras andaluz (PISTA) ha quedado desfasado y el Gobierno va a aplazarlo hasta el 2020. ¿Apoyan esa reprogramación?

--Apoyamos siempre que se haga obra, pero nos gustaría que los plazos fueran más cortos. En su día se planificaron las obras y todas son muy necesarias para Andalucía. La que no sea necesaria, que no se haga.

--Con la crisis, ¿diría que los ingenieros de Caminos son el colectivo más afortunado dentro de la construcción?

--No, lo que pasa es que hay muchos menos ingenieros que arquitectos o aparejadores. El otro día me contaba un compañero que fue a Mediamark a comprar una tele y le atendió un chaval ingeniero de Caminos. Somos un sector igual de perjudicado que los demás.

--¿Las perspectivas para el 2012 son peores?

--A estas alturas lo que estamos viendo nos demuestra que sí. Teníamos cierta esperanza en que el Gobierno del PP fuera más misericordioso y no ha sido así. Siguen con la política fácil del recorte en la obra pública.

--Las constructoras denuncian impagos de la Junta desde el 2007. ¿Cómo se puede sostener la actividad?

--Pues casi no se puede sostener. La política de dar pagarés ahora ya no se puede soportar. Las empresas están muy debilitadas.

--¿Qué obras se verán afectadas por los recortes e impagos?--Todas las grandes obras: la A-7, la SE-40, el AVE trasversal de Sevilla a Granada y, por supuesto, todo el sistema de tranvías y metros.

--Ahora que se debate de nuevo el éxito o el fracaso de la Economía Sostenible, ¿qué opina?--Que los sectores que tradicionalmente han dado riqueza hay que preservarlos, pero siempre con control. Hemos avanzado mucho en España; ahora se tiene más cuidado con el medio ambiente, pero no se pueden supeditar las obras a ciertos estándares que ahora mismo un país no se puede permitir.--¿Pero cree, como dijo Javier Arenas, que es una milonga?--Me gustaría saber qué es exactamente la Economía Sostenible. Si es todo lo relacionado con el medio ambiente, desde luego hay que cuidarlo, pero el concepto no está bien definido.

--¿Pero cree, como dijo Javier Arenas, que es una milonga?

--Ante este panorama, ¿qué diría a los jóvenes que estudian Ingeniería de Caminos?