Griñán escuchó ayer 13 veces la palabra dimisión en el Parlamento, la mayor parte dirigidas hacia él, y otras tantas hacia la consejera de Hacienda, Carmen Martínez Aguayo. IU y PP dan por sentado que la legislatura se ha terminado y que a Griñán no le queda nada mejor que hacer que defenderse de las supuestas irregularidades que "asedian" a su Gobierno: la investigación sobre los ERE fraudulentos, sobre las ayudas al empleo y la contratación... Al final Griñán reaccionó con aplomo: "En esta legislatura hemos aprobado siete leyes que aún tenemos que desarrollar. Todavía tenemos conflictos que resolver. Hay agenda y hay contenido. Y no habrá elecciones hasta marzo deL 2012".

La oposición usó la sesión de control al Gobierno para intentar arrinconar al presidente, al que acusaban de conocer y obviar los informes de Intervención que advirtieron de los riesgos en el procedimiento de pago de ayudas a empresas en crisis. "La Intervención no elevó ningún informe de actuación al titular de Hacienda". Cuando finalmente Griñán pronunció estas palabras, en respuesta al líder de la oposición, Javier Arenas, el PP activó el segundo resorte de su estrategia. Arenas quería forzar la respuesta de Griñán porque después su partido pensaba hacer público un "informe definitivo de cumplimiento" que el interventor envió a Hacienda en 2006, cuando él era titular del departamento y Aguayo viceconsejera. El PP entiende que ese informe demuestra que Griñán acababa de mentir. "Hay una verdad jurídica en los tribunales. Pero hay otra verdad: la política, que usted nos está negando", le había dicho Arenas.

Pero Griñán no había respondido nada nuevo. Aguayo ya explicó la semana pasada que "no hubo ningún informe de actuación" que advirtiera de un menoscabo del dinero público. Los tres informes que Intervención envió a Hacienda --incluido el que enseñó el PP-- eran procedimentales y advertían de los riesgos del procedimiento. La ley dice que esos informes debían llegar a Griñán, entonces consejero, pero fue Aguayo quien los recibió "de oficio" y, según explicó, "no los leyó al detalle" y "no los comentó" con Griñán. El líder de IU, Diego Valderas, también estuvo muy beligerante con la supuesta trama de los ERE. El titular de Empleo, Manuel Recio, explicó que la investigación interna sobre los ERE ha concluido, a falta de rúbrica, con 59 intrusos en ERE de empresas donde nunca trabajaron y 87 irregularidades administrativas.