Uno de cada tres contratos de compraventa de vivienda en Andalucía (el 35% de ellos) incluye algún tipo de cláusula abusiva, como por ejemplo imponer al consumidor el pago del Incremento de Valor de los Terrenos de Naturaleza Urbana (Plusvalía) o los gastos que corresponden legalmente al vendedor, impedir al usuario la libre elección de notario o que se prevea un plazo de entrega de la vivienda sin fijar una fecha cierta.

Así se desprende de la campaña de inspección sobre la información en la compraventa y arrendamiento de viviendas realizada en 2009 por la Consejería de Salud a través de su Dirección General de Consumo y que ayer presentó la titular del ramo, María Jesús Montero.

Montero dijo que los resultados de esta campaña revelan que en uno de cada dos casos estudiados (el 49%) se ha detectado alguna infracción de la normativa que protege al consumidor en el sector inmobiliario. No obstante, siendo elevado el porcentaje, se registra una tendencia a la baja en los últimos años y el grado de incumplimientos se ha reducido en 18 puntos, pasando del 67% en el 2006 al 49% del 2009.

Explicó que esta reducción en los incumplimientos se ha experimentado coincidiendo con la puesta en marcha del nuevo Reglamento de Información al Consumidor en la Compraventa y Arrendamiento de Viviendas en Andalucía, que obliga desde hace tres años a las inmobiliarias y promotoras a tener a disposición del público un documento con información clara y precisa sobre las características del inmueble y las condiciones económicas de la oferta.