Las consecuencias de la crisis económica vuelve a desplazar por segundo año la preocupación de los andaluces por el medio ambiente, según los resultados arrojados por el Ecobarómetro de Andalucía correspondiente al 2009, que refleja que las cuestiones que más inquietan a la población andaluza son los incendios y de manera emergente el fenómeno del cambio climático.

De este modo, según informó ayer la consejera de Medio Ambiente, Cinta Castillo, en compañía del director del Instituto de Estudios Sociales Avanzados (IESA), Eduardo Moyano, organismo que colabora en la realización de esta encuesta, la "difícil" situación económica "centra las preocupaciones de la ciudadanía andaluza (99,6%), desplazando la identificación de los temas ambientales como uno de los principales problemas de Andalucía a la tercera posición en el ranking (11,9%), precedido de la seguridad ciudadana (13,8%).

Asimismo, Castillo explicó que dicha encuesta, realizada sobre una muestra de 3.159 entrevistas, evidencia que los incendios siguen siendo el problema medioambiental que más preocupa a los andaluces, seguido de la contaminación de playas y la escasez de agua, aunque este último punto disminuye con respecto al pasado año por las lluvias registradas.

Destacó que el cambio climático "se consolida como uno de los principales problemas medioambientales" percibidos por los andaluces a nivel global (54,4%). De hecho, apuntó que el porcentaje de los encuestados que lo identifican como uno de los factores de riesgo más acusados han aumentado un 20% desde el inicio en el 2001 de las series analizadas por el Ecobarómetro.

La lista de prioridades varía en función del tamaño de la población en la que residan los encuestados, señalando que, a nivel local, la mayor preocupación respecto al medio ambiente la representa el ruido, especialmente en los municipios de menos de 5.000 habitantes; mientras que en las localidades de más de 100.000 habitantes la suciedad en las calles es identificado como el principal problema medioambiental.