La Junta de Andalucía prevé terminar la elaboración del documento marco del Libro Blanco sobre el Envejecimiento Activo y poner en marcha las medidas para los mayores que en él se incluyan antes de que finalice el año.

Así lo anunció ayer la consejera para la Igualdad y Bienestar Social, Micaela Navarro, en Granada, donde participó en un encuentro con representantes de colectivos de personas mayores de Andalucía Oriental para informarles sobre este documento y recabar sus propuestas y necesidades.

Este texto, que incluye un total de 65 propuestas para intervenir en diferentes ámbitos de las personas mayores en la comunidad, parte de la previsión de que la población actual de mayores de 65 años en Andalucía, que es de 1,2 millones, pasará a ser de dos millones en el 2050.

Navarro señaló que muchos de los mayores no son usuarios de recursos asistenciales y "están en perfectas condiciones para desarrollar una vida autónoma e independiente". El aumento de la esperanza de vida de las personas que llegan a los 65 años "ahora es de entre 25 y 30 años más", etapa que hay que llenar por ejemplo "a través de los programas en centros de día y convenios con todas las universidades andaluzas".

La consejera explicó que se trata de recoger las "inquietudes y necesidades" de los mayores porque no se va a hacer un libro blanco para ellos "sin recoger sus necesidades". Actualmente el documento está en elaboración y se trabaja por grupos a través de las distintas asociaciones para establecer programas para personas a partir de 50 años para que se adentren.