La promotora inmobiliaria Aifos, con destacadas inversiones en la Costa del Sol, ha entrado en concurso voluntario de acreedores con un pasivo superior a los 1.000 millones de euros y unos 2.000 acreedores, según ha acordado el Juzgado de lo Mercantil número 1 de Málaga.

Fuentes judiciales informaron ayer de que la compañía había presentado el concurso voluntario al no poder alcanzar un acuerdo con sus acreedores cuando ya estaba en situación preconcursal, lo que alertaba de su difícil situación.

El concurso se publicará en el Boletín Oficial del Estado (BOE) y los acreedores empezarán a presentar sus deudas al juzgado, para lo que dispondrán de un mes de plazo una vez que se les notifique esta situación. El concurso supone la quiebra de la empresa, entre cuyos acreedores estarán quienes tuvieran pendiente la entrega de una vivienda.

ACREEDORES Fuentes financieras informaron que los principales acreedores, por volumen de los préstamos, son Caja Madrid, Banco Popular, Caja España, Cajasol y Banesto, si bien la promotora también tenía créditos con La Caixa, BBVA, Caixa Galicia, Unicaja y Banco Pastor.

Aifos explicó ayer en un escueto comunicado que ha instado el concurso voluntario con el objetivo de "garantizar la construcción de las 3.000 viviendas suscritas con sus clientes y su entrega en el menor plazo posible". Considera además que el concurso "permitirá la reordenación de la deuda del grupo para combatir la crisis inmobiliaria así como garantizar la pervivencia de la actividad de la empresa, el cumplimiento de los contratos con terceros y el mantenimiento del empleo de sus trabajadores".

OPERACION MALAYA Aifos tenía desde hace tiempo problemas, que empezaron cuando varios de sus principales ejecutivos fueron detenidos en la primera fase de la operación Malaya contra la corrupción municipal e inmobiliaria de Marbella, entre ellos el presidente de la empresa, Jesús Ruiz Casado, que estuvo en prisión preventiva hasta abonar una fianza de 500.000 euros.

El juzgado mercantil admitió a trámite el pasado 19 de enero el concurso necesario de acreedores presentado contra Aifos por un proveedor asesorado por IURE Madrid, que reclama junto a otro afectado cerca de 392.000 euros al grupo.

En un auto, el magistrado Enrique Sanjuán consideró entonces que Aifos reunía "condiciones objetivas" para ser declarado en concurso de acreedores, según los documentos aportados, que reflejaban entre otros aspectos que en el registro de morosos RAI constaban avisos de impagados por valor de 7,9 millones de euros. Esta fue la primera vez que el juez decidió admitir un procedimiento por insolvencia contra Aifos, después de que a principios de diciembre rechazara el solicitado por la empresa Gestión de Obras y Reformas.

Por otra parte, hace unos días trascendió que un representante de Aifos se enfrentará a una petición de tres años de cárcel por la venta de una promoción en Torrox que nunca llegó a construirse y además carecía de licencia.

El juzgado declaró también hace algo más de dos meses un concurso de acreedores en el hotel Guadalpín Marbella, del grupo Aifos, tras la petición de un empresario de Madrid.