El Gobierno andaluz defendió ayer como una "oportunidad única" para la comunidad la fusión entre CCM y Unicaja, cuya entidad resultante tendrá su sede social en Málaga, y garantizó que la caja andaluza "no se verá contaminada" por los problemas económicos de la castellanomanchega. El vicepresidente Zarrías respaldó ayer este proceso, que se viene produciendo tanto en el ámbito financiero como en el institucional, y no dudó en señalar que la fusión será "buena" para el conjunto del sistema financiero andaluz y español. En las conversaciones están participando la directivas de ambas cajas, el Banco de España y, en momentos concretos, el Ministerio de Economía, si bien Zarrías recordó los contactos mantenidos entre los presidentes de ambas comunidades al ser los dos gobiernos autonómicos los que, en aplicación de la Lorca, deberán dar la autorización correspondiente a la fusión.