Hay dos categorías de extranjeros en Andalucía (también en el resto de España): los residentes de la Unión Europea o de países ricos que buscan calidad de vida, muchos de ellos jubilados, y los inmigrantes económicos. Y no se mezclan.

Según el padrón definitivo, a 1 de enero de 2006, que ha publicado el Instituto Nacional de Estadística, unos eligen municipios de la costa. Los otros, centros de actividad económica. Unos son mayores que la media y tienen una natalidad bajísima, los otros, cuando la residencia está consolidada, llenan de niños algunas localidades. Especialmente, si predominan los marroquíes. Lo explica el sociólogo y presidente del Foro para la Integración Social de los Inmigrantes, Lorenzo Cachón: Es la inmigración más antigua, con más permisos de residencia, lo que facilita la reagrupación familiar.

Andalucía tiene lugares destacados tanto en el turismo residencial como en inmigración económica. Ejemplo de lo primero es la provincia de Málaga, con Torrox como prototipo. De los 488.928 extranjeros de Andalucía, a Málaga le corresponden más del 40%, 203.977; y de 167.787 comunitarios, 100.010 en total . No es extraño que allí esté el tercer municipio en porcentaje de extranjeros mayores de 65 años, Torrox. De una población de 14.925 personas, 4.929 son foráneos y de ellos 1.746 (es decir, más del 35% del total), mayores de 65 años.

TRAS EL PUEBLO MAS VIEJO En Nerja, ese porcentaje es de un 29,2%, y ocupa el décimo lugar. Pero Andalucía coloca también un municipio, La Mojonera, en Almería, entre los que tienen un mayor porcentaje de niños extranjeros, con un 24,3%.

La situación andaluza contrasta, pone como ejemplo el sociólogo, con otro lugar de costa de élite , el de Baleares. Las Islas Baleares tienen el porcentaje mayor de extranjeros de toda España, un 16,72%. Más del 43% de ellos son europeos comunitarios. Pero no de cualquier país. De ricos, de los que no exportan mano de obra. Los alemanes, por ejemplo, representan el 15,7% de los extranjeros, mientras en España son un 3,63%. Los rumanos, sólo un 2,88%, cuando en el resto de España es de un 9,82%. En Baleares, casi uno de cada tres alemanes tiene 60 o más años.