El presidente del PP-A, Javier Arenas, dijo ayer que los primeros cien días de Gobierno de la Junta han puesto de manifiesto que la "confrontación con el Gobierno de España era un fraude, porque inmediatamente después de las elecciones hemos visto al Gobierno de la Junta con las rebajas".

En la clausura de la reunión mantenida ayer en Granada por el comité ejecutivo regional, Arenas apuntó que el "título" de ese fraude podría ser el de "la confrontación estéril a la sumisión partidista. Me peleo y digo que no a todo lo que dice el Gobierno de España porque no es de mi partido y luego, cuando está mi partido, digo que sí a todo, diga lo que diga".

Arenas apuntó que el presidente Chaves y sus consejeros "se han pasado ocho años insultado a Aznar y sus ministros" y acusó al máximo mandatario andaluz de tener ahora "un ataque de amnesia, ya que no recuerda lo que le pedía a Aznar".

Respecto a la postura de la Junta ante el Plan Hidrológico Nacional, Arenas la calificó de "vergonzosa" y criticó a Chaves por acudir a colocar con Aznar la primera piedra del trasvase del Ebro a Almería para después del cambio en el Ejecutivo central "apoyar la posición de Carod-Rovira y Maragall de ni una gota de agua para Murcia, Comunidad Valenciana y Andalucía".

Arenas apuntó que los cien primeros días de la Junta, que se cumplirán próximamente, han puesto de manifiesto también que "tenemos un Gobierno absolutamente conservador", ya que no ha realizado ninguna propuesta o reforma para "transformar Andalucía", a lo que añadió que se puede ser "socialista y ser muy conservador y ser centrista y al mismo tiempo muy reformista y progresista".

Respecto a la evolución del PP-A tras las elecciones, Arenas destacó que de los cerca de 4.000 nuevos afiliados con los que cuenta su formación, 3.200 son jóvenes, de los que dijo que "se rebelan porque sólo han conocido un Gobierno" y de los que espera que sean el "motor de cambio y los que nos van a dar una oportunidad para gobernar en el futuro".

LOS CONGRESOS DEL PP Arenas dijo ayer que los congresos que afrontará su formación tras el verano tienen que suponer un avance en la renovación del discurso político del partido y de su imagen en Andalucía y la incorporación de nuevos dirigentes sobre la base de "renovación por adición". Arenas subrayó que el partido mantendrá "su conexión y su unidad si se renueva siempre conservando lo bueno que tiene y se garantiza que todos tenemos un papel político que jugar en nuestra organización". Apuntó que la idea central del congreso del PP-A tendrá mucho que ver con "la alternancia es democracia y el PP como garantía de ese cambio".