El Calderería Manzano de Bujalance, que milita en la Segunda División B del fútbol sala español, ha presentado una hoja de resultados impecable en la primera vuelta, que le ha llevado a estar hasta en segunda posición, codeándose con los más poderosos de la categoría.

Todo ello a pesar de ser un club modesto y formado con nuevas adquisiciones, pero que el entrenador Macario ha conjuntado perfectamente, junto a los jugadores de la anterior campaña. Formando un gran bloque perfectamente engrasado, que se entrega en el juego, con un peligroso ataque y sobre todo con una feroz defensa.

Antes del parón navideño, el Calderería Manzano disputó en el mes de diciembre tres encuentros saldados con victoria. Uno fuera, frente al Manilva, al que se derrotó por 2-3, y dos más en el pabellón bujalanceño Pepe Montalbán.

El primero fue contra el Almendralejo, al que derrotó contundentemente por 9-0. Fue una cómoda victoria, ya que el equipo rival no opuso ninguna resistencia, buena voluntad y nada más. La primera parte fue de dominio absoluto, con un marcador de 4-0. En la segunda mitad, también de guante blanco, los bujalanceños redondearon el 9-0, sin apretar tampoco en demasía.

La semana siguiente, los de Macario visitaban la cancha del Ategua, en el derbi cordobés, pero que tuvo que ser suspendido por la humedad que presentaba la cancha, que hacía peligrar la integridad de los jugadores.

Tras esa semana de descanso, Bujalance recibió una nueva visita, la del equipo del Ejido, con el que se logró la séptima victoria consecutiva. El partido no comenzó bien, ya que los visitantes se adelantaron en el marcador. Pero fue Huguito el que estableció inmediatamente el empate y desde ese momento el Calderería Manzano fue superior y terminó vapuleando a su rival por el claro 10-3.

Tras la parada navideña, el equipo bujalanceño recibió al peligroso Racing Alameda, que en un partido raro y lleno de errores arbitrales, cayó derrotado por 3-6, de forma injusta, ya que siempre llevó el peso del encuentro y las más claras ocasiones, mientras que los malagueños pusieron una férrea defensa, aprovechando los fallos arbitrales, que desquiciaron al equipo al final del encuentro.

El pasado miércoles 16, se disputó el derbi cordobés suspendido con el Ategua, que terminó desgraciadamente, con una derrota por 2-1, sólo a falta de 30 segundos.

El partido se jugó de poder a poder por dos grandes escuadras, ambos con la intención de ganar el partido, disputado como pudo verse hasta el último segundo, por lo que pudo haber caído del lado de cualquier contendiente.