SEQUÍA

Los agricultores se encomiendan a los pozos para salvar la arboleda

La Comisión de Desembalse autorizará hoy una dotación de entre 350 y 400 hectómetros cúbicos | La Mesa Nacional de la Sequía analizará el miércoles las repercusiones de la falta de precipitaciones

Imagen de archivo de una instalación de riego en la provincia de Córdoba.

Imagen de archivo de una instalación de riego en la provincia de Córdoba. / A.J. González

Rafael Valenzuela

Rafael Valenzuela

El peor escenario posible se ha cumplido. No ha caído ni una gota en el mes de marzo y la situación del campo empeora por momentos. Hoy lunes se reúne la Comisión de Desembalse de la Confederación Hidrográfica del Guadalquivir para aprobar la cantidad de agua con la que contarán los regantes para sus explotaciones. Dado que la situación no ha variado desde la última reunión, el 2 de marzo, sino que ha empeorado, las dotaciones previstas serán las mismas, es decir, un desembalse de entre 375 y 400 hectómetros cúbicos, con una dotación para los cultivos de mayor consumo de 700 metros cúbicos por hectárea.

Una de las funciones principales de la comisión es la de hacer un uso de los recursos acorde a la disponibilidad de los mismos. Desde la Asociación de Comunidades de Regantes de Andalucía, Feragua, su secretario general, Pedro Parias, ha indicado a CÓRDOBA que los regantes son conscientes de la situación y , dado que las esperadas lluvias de marzo no se han producido, habrá que optimizar los recursos al máximo y las dotaciones que se van a conceder, que suponen un 80% menos de lo habitual, tendrán como finalidad fundamental el mantenimiento de los árboles, salvo en aquellos lugares donde se disponga de aguas subterráneas que permitan hacer algún aporte a las explotaciones. «No podemos multiplicar un agua que no hay, lo que se ha de procurar es que se reparta lo mejor posible», apunta Parias, y ponerse de nuevo a esperar que abril y mayo subsanen la situación en forma de precipitaciones abundantes. En estos momentos, la regulación general de la cuenca almacena 1.281 hectómetros y se encuentra al 22,7% de su capacidad total

La dotación de los 700 metros por hectárea que se concederán en la mayor parte de la provincia empeora en la zona del Bembézar, el Retortillo y Sierra Boyera, donde la concepción «será cero», señala Parias, de modo que en estos lugares más que en otros los recursos subterráneos, de haberlos, jugarían un papel fundamental. Hay que tener en cuenta, apunta, que en la provincia hay muchas zonas de arboleda, como son naranjos, olivos superintensivos, almendros y frutales, y, por citar el caso de los naranjos, una hectárea necesita en torno a 5.000 o 6.000 metros cúbicos de agua, y recibirán, en el mejor de los casos, 700, lo que supone un 10%. Si se habla de otros cultivos como el cereal, el girasol, el maíz o los hortícolas se ha optado por reducir muchísimo la superficie sembrada y la que se ha plantado se está viendo muy perjudicada. Los productores de cebolla y ajo de la provincia han podido hacer un riego de emergencia, porque la Confederación autorizó un desembalse en Iznájar de 3,5 hectómetros atendiendo a las demandas del sector ante el peligro de perder las cosechas.

Confían desde Feragua en que se puedan autorizar los riegos con aguas subterráneas donde sea posible y que la Confederación pueda atender, como ha hecho en el Genil-Cabra, las necesidades urgentes que surjan, pero matiza que hay que ser responsable con las peticiones, porque «si el agua que hay se gasta en abril, no habrá para junio».

Los regantes indican que su voluntad es la de colaborar para optimizar el poco recurso del que se dispone, pero instan al Gobierno a que dicte lo antes posible el decreto de sequía, en el que se incluyan las medidas de apoyo y compensatorias para los productores. Además, reclaman que se incluya en el mismo decreto una fórmula para articular los posibles ERTE que se tengan que ejecutar en las comunidades de regantes ante la falta de actividad. También hacen un llamamiento a la Junta de Andalucía para que, en la medida de sus competencias, se sume a las medidas de apoyo que el campo está necesitando ya.

Por otro lado, también este miércoles está convocada la Mesa Nacional de la Sequía, en la que se analizará la situación que atraviesa el país en cuanto a recursos hídricos disponibles y la repercusión que la falta de lluvia está teniendo en el campo.

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