Con menos de un hectómetro cúbico de agua almacenada (0,924 hm), que suponen un 2,34% de su capacidad total, el embalse de Sierra Boyera solo tiene recurso para el suministro humano de las comarcas del norte de Córdoba para un mes y medio. Esta situación se daría si no se acaban antes las obras urgentes de conexión con la presa de La Colada, que permitiría poner en marcha un trasvase de urgencia que solventaría la solución.
Los 80.000 habitantes que se sirven de esta infraestructura hídrica, que son los residentes de las comarcas de Los Pedroches y El Guadiato, esperan que se cumplan los plazos fijados para la citada obra, que en principio apuntaban al mes de enero, pero que después se decantaron por febrero. Desde la Confederación Hidrográfica del Guadiana, entidad que se ha hecho cargo de la obra de urgencia, indicaban ayer a este periódico que «las obras van bien, muy avanzadas, pendientes de algunos suministros, pruebas y puestas en marcha de los distintos elementos», sin concretar más sobre las mismas. Por su parte, desde Emprocsa, su presidente, Esteban Morales, indicaba que para mañana miércoles hay prevista una reunión sobre este asunto en la que esperan recibir una información más exacta sobre el estado de los trabajos.
Otras fuentes señalaron a este periódico que el montaje de las tuberías ya está terminado y el equipo técnico de la Confederación del Guadiana señalaron el 23 de diciembre que la obra civil del depósito y la nave de la estación de rebombeo estaban «próximas a su finalización».
La conclusión de los trabajos de conexión entre las dos presas y la puesta en marcha del bombeo serían suficientes para salvar la delicada situación en la que se encuentra en estos momentos el suministro de agua a los vecinos de la zona norte, puesto que, según informó a este periódico el presidente de la Confederación Hidrográfica del Guadalquivir, Joaquín Páez, esta conexión bombeará unos 12 hectómetros cúbicos de agua al año y la demanda de la población de las comarcas se acerca solo a los 9 hectómetros. Esos recursos, unidos a los que se puedan aportar de los acuíferos localizados por Emproacsa en la zona del Guadiato, garantizaría el suministro para ambas comarcas. También han ayudado algo en prolongar los recursos las lluvias, aunque han sido escasas, caídas en el mes de diciembre.
Las obras de urgencia de conexión entre La Colada y Sierra Boyera tienen un presupuesto de ejecución que superan los cuatro millones de euros y están siendo acometidas por la Confederación Hidrográfica del Guadiana, con la intención de tomar una medida de choque ante la prolongada sequía y la escasez de agua en la zona y después de que las obras de conexión entre ambas infraestructuras, que eran competencia de la Junta, quedaran paradas años atrás.
La obra en cuestión consiste en montar una toma de agua en La Colada sustentada sobre flotadores. En dicha superficie flotante se monta una estación de bombeo que eleva el agua, a través de una tubería, de unos 700 metros, hasta la red que ya había construido la Junta de Andalucía. Estas conducciones llevan el agua hasta un depósito instalado en el Cuartanero, desde donde se regula el abastecimiento hasta la Estación de Tratamiento de Aguas Potables (ETAP) de Sierra Boyera.
Según explicó en su momento el jefe de obras de la Confederación del Guadiana, la instalación contará con cuatro bombas, más una de reserva, «con capacidad de elevar cada una unos 100 litros por segundo y de 355 kilovatios de potencia. A ellas se sumarán otras dos bombas de menor potencia hasta llegar al Cuartanero, donde las conducciones existentes emplean la gravedad para el transporte del agua.