Ya no es posible ver lobos en Córdoba ni en Andalucía. La presión a la que se vieron sometidas las pequeñas poblaciones que habían sobrevivido provocó que 2013 fuera el último año en el que se detectaron. El lobo, que se localizaba en la zona norte de Hornachuelos y en Espiel, es historia de una pésima gestión. La evolución hacia la desaparición que siguió esta especie en peligro de extinción se pudo detener en otras como el lince ibérico gracias al apoyo de la Unión Europea.

Desaparecido el lobo, ¿cuáles son las especies en peligro en Córdoba y cuál es su grado de amenaza? Las distintas legislaciones europeas, estatal y autonómica recogen dos categorías de amenaza: en peligro de extinción (EN) y vulnerable (VU). A éstas hay que unir las especies en protección especial.

El lince ibérico ha seguido una tendencia muy distinta al lobo. Hasta el año 2004, la persecución humana y la reducción de la población de conejos, su principal alimento, hizo que estuviera muy cerca de la extinción. Fue en 2002 cuando la Unión Europea comenzó a destinar fondos a través de distintos proyectos Life para conservar la población o favorecer la cría en cautividad. Hoy, con datos del año 2020, Andalucía tiene localizados cinco núcleos de reproducción y 506 ejemplares que se distribuyen en Andújar-Cardeña (216 individuos), Doñana-Aljarafe (85), Guarrizas (140), Guadalmellato (51) y Sierra Morena central (14).

Córdoba es también uno de los principales núcleos para la conservación del águila imperial, especie en peligro de extinción. La principal zona de cría se encuentra en Jaén, con 50 parejas en 2020, seguida de Córdoba, con 32, y Sevilla, con 27. El resto se distribuye entre Huelva (6), Cádiz (5) y Granada (3).

En peligro de extinción está el milano real, que se extiende por las cuatro provincias occidentales de Andalucía. En el invierno de 2019/2020 había 2.122 ejemplares que se localizaban en 23 dormideros. Precisamente, Córdoba, con 12, era la que presentaba un mayor número y más ejemplares: 1.310 de 2.122. Sin embargo, Córdoba no contaba con ninguna pareja que anidara en la provincia y en la comunidad solo existían 25 (22 en Huelva y 3 en Cádiz). Detrás de esta progresiva disminución se encuentra la mortalidad por envenenamientos con cebos o el control ilegal de depredadores.

La población de alimoche está en una situación dramática en Andalucía. Catalogada en peligro de extinción, en el año 2020 se detectaron 28 parejas en la comunidad, de las que 2 se pudieron ver en la provincia de Córdoba, en la zona de Los Pedroches-Guadiato. El veneno, junto con los parques eólicos, son las principales amenazas para la recuperación de esta rapaz en Andalucía.

Mejor evolución ha seguido el buitre negro, una de las mayores rapaces del mundo con una envergadura entre 2,50 y 2,95 metros. Desde el año 2012 está incluido en la categoría de vulnerable. En Córdoba se contabilizaban 69 parejas reproductoras en 2019 en la Sierra de Hornachuelos y 1 en la Sierra de Adamuz, de las 422 que se censaron en la comunidad autónoma.

Entre las aves esteparias, la avutarda está catalogada en peligro de extinción. Se localiza en el Valle del Guadalquivir, teniendo como núcleo principal las campiñas de Sevilla y en menor medida las provincias de Córdoba y Jaén. Asimismo, se sitúa en el noroeste de Córdoba.

El sisón, la ganga ibérica y la ganga ortega han sufrido una merma importante de su población, mientras que ya no se localiza la alondra ricoti y el torillo andaluz se ha extinguido. En peligro de extinción se encuadran seis especies de aves de humedales: el avetoro, la cerceta pardilla, el porrón pardo, la malvasía cabeciblanca, la focha moruna y la garcilla cangrejera. Por su parte, el águila pescadora está catalogada como vulnerable en Andalucía. Entre las especies que han seguido peor tendencia en Córdoba es la malvasía cabeciblanca, que tenía en la laguna de Zóñar su principal reserva en Andalucía. En 2020 solo se localizaron dos parejas de las 37 que se reprodujeron en Andalucía.

Por último, la cigüeña negra, presente también en Córdoba, está en peligro de extinción.