Unos 4.500 agricultores y ganaderos, según estimaciones de la Policía Nacional, y 15.000 según los cálculos de las organizaciones agrarias convocantes del paro general en Andalucía y la movilización en Sevilla este viernes --Asaja, COAG y Cooperativas Agroalimentarias de Andalucía-- han participado en la marcha hispalense. A ellos se unen 85 tractores, según la Policía, y 500 según los convocantes para pedir soluciones ante lo que han denominado "una tormenta perfecta" para el sector por la sequía, la reforma de la Política Agraria Común (PAC), el aumento de costes de producción, y ahora la nueva incertidumbre que se suma por la crisis en Ucrania.

La marcha ha arrancado alrededor de las 11.30 horas del estadio Benito Villamarín --algo más de una hora después del horario previsto-- para iniciar un recorrido por la Avenida de la Palmera que ha concluido pasadas las 14.00 ante la sede de la Delegación de Gobierno, en la Plaza de España. Allí han exigido "soluciones reales que permitan mantener la rentabilidad de las explotaciones agrarias de la comunidad andaluza" recordando que "sin agricultura y ganadería, Andalucía no es nada".

"Agricultura y ganadería: una cuestión de Estado" es el lema que ha encabezado la movilización, en la que se ha reivindicado la importancia del sector andaluz, "que supone el 36% del empleo agrario" nacional, ha expuesto el secretario general de Asaja Sevilla, Eduardo Martín.

La España vaciada

"A los políticos se les llena la boca de la España vaciada, pero a la hora de la realidad aquí se legisla contra el sector agrario", ha considerado Martín en una declaración a los medios. "¿Cuándo se va a enterar este Gobierno y todos los que tengan que venir que el sector agrario es fundamental? Nosotros ya no queremos ni ayudas, queremos que nos dejen en paz. Queremos que nuestra actividad valga, y que lo que producimos salga adelante", ha remarcado antes de apuntar que lo que se pide es también "que no nos pongan palos en la rueda, que es lo que hace este Gobierno".

Representantes del sector agrario cordobés, durante la manifestación. CÓRDOBA

Por su parte, el secretario general de COAG Andalucía, Miguel López, ha destacado que el sector afronta "la tormenta perfecta" entre costes de producción "incontrolables", sequía y cambios en la PAC a los que ahora se suman los posibles efectos del conflicto en Ucrania, que "va a afectar al gas y al petróleo", cuyo impacto también se sentirá, ha dicho, en las importaciones. "Importamos un 30% de maíz, un 15% de cereales", ha comentado, apuntando que no saben si van a conseguir alimentación para el ganado.

A ello se suma los bajos precios que se pagan en origen por la producción. López ha pedido al Gobierno tratar la situación del agro como "lo que es: un problema de Estado" y que los ministros "se sienten a negociar y busquen soluciones reales al sector". Sobre el titular de Agricultura, Luis Planas, ha apuntado que "ha demostrado ser un inútil" con el que no están "nada contentos" porque "nos está despreciando de manera continua".

Mientras, el vicepresidente de Cooperativas Agroalimentarias de Andalucía, Cristóbal Gallego, ha enfatizado que desde el Ejecutivo, "de manera soterrada", se les está "engañando" y se está "trasladando los fondos de Andalucía a otras zonas". "¿Y por qué? Por un puñado de votos. Y van en contra de los agricultores. Como bien se ha dicho, no vamos a parar y vamos a llegar donde tengamos que llegar, porque llevamos la razón".

Asimismo, ha lamentado que la reforma laboral "no tiene en cuenta la temporalidad en el campo" y ha apuntado que mientras les "exigen cuestiones medioambientales cada vez más exigentes para poder percibir las ayudas" observan cómo "en cambio nos entran productos por toda la frontera europea sin rigor y compiten con nosotros en los comercios y supermercados más importantes".

Subida de costes y competencia desleal

La subida de los costes de producción, la competencia desleal de terceros países, la reforma y el Plan Estratégico de la PAC, las novedades laborales y una sequía severa, que asfixia al sector productor desde hace varias campañas, son algunos de los problemas que, sostienen las organizaciones, "están comprometiendo el futuro del sector agrario andaluz, una actividad clave para el desarrollo socioeconómico de las zonas rurales, que crea empleo, fija población al territorio y vela por el medio ambiente".

Tanto productores como cooperativas creen "necesario" que se articulen medidas "urgentes" que garanticen precios justos en origen, ayudas por la inasumible subida de los costes de producción, un control "exhaustivo y reciprocidad" sobre las importaciones de terceros países, que "se corrija" el Plan Estratégico de la PAC, que en su forma actual "ataca la competitividad del sector agrario andaluz y le priva de 450 millones de euros", y una política hídrica real y consensuada, acompañada de ayudas e inversiones, que permitan paliar los nefastos efectos de la sequía.

La Junta pide más apoyo

Por su parte, la consejera de Agricultura de la Junta de Andalucía, Carmen Crespo, ha reclamado al Gobierno central que "acompañe" las medidas puestas en marcha por el Ejecutivo andaluz para solventar las reclamaciones de los agricultores.

En declaraciones a los periodistas antes de participar en los actos con motivo del Día de Andalucía que se celebran en Adra (Almería), la consejera ha afirmado que "es urgente" que el Gobierno central acometa las obras hidráulicas de interés general del Estado para garantizar los recursos hídricos en territorios más secos, toda vez que ha insistido en que el Ejecutivo central debe presionar la modificación de la nueva PAC con la introducción de cuatro 'ecoesquemas' más que eviten "una pérdida de fondos" a los productores andaluces, que son "el 35 por ciento de los perceptores de la PAC".

La consejera ha respaldado así las protestas de los agricultores y se ha mostrado favorable a que el Gobierno reclame ante Bruselas más controles para evitar la "competencia desleal" y "las cláusulas espejo" ante las producciones importadas procedentes de países extracomunitarios, de cara a que todos los agricultores tengan "las mismas oportunidades" en términos de calidad.

El Gobierno asegura "firmeza" ante la situación del sector agrario

El delegado del Gobierno de España en Andalucía, Pedro Fernández, ha afirmado este viernes que el Ejecutivo es consciente de la "difícil situación que atraviesan los agricultores y ganaderos andaluces" y ha asegurado que están actuando con "firmeza" para tratar de solventar su estado.

En un comunicado, Fernández ha explicado que desde el Estado se está actuando "a todos los niveles, tanto en Europa como a nivel regional", proponiendo medidas "específicas" y sacando adelante "normativas que ayuden a paliar la grave situación derivada de la sequía y del elevado coste de producción".

Ha defendido el aumento del porcentaje del anticipo de los pagos directos de la Política Agraria Común (PAC) de 2022, la introducción de excepciones en la práctica de diversificación de cultivos, o la posibilidad de que las comunidades autónomas puedan conceder ayudas a los productores más afectados a través de los fondos para el desarrollo rural. También se ha referido a la reforma de la Ley de medidas para mejorar el funcionamiento de la cadena alimentaria, que entró en vigor el pasado mes de diciembre para "mejorar la sostenibilidad y rentabilidad del sector agroalimentario".

Fernández ha destacado la "conquista histórica" que supone "blindar el precio que se paga a los agricultores y ganaderos por sus productos para que no sea superior a los costes de producción". Por ello, ha expresado su sorpresa por "la actitud de aquellos que votaron en contra de esta Ley y que ahora se ponen a la cabeza de las legítimas reivindicaciones de los agricultores y ganaderos por la difícil situación que están atravesando".

Además, ha asegurado que el Gobierno ha conseguido que, con una disminución del 15 por ciento del presupuesto comunitario, España recibiera "los mismos fondos de la Política Agraria Común", es decir, un total de "47.724 millones de euros". En este sentido, ha resaltado que se han incrementado las ayudas acopladas en la nueva PAC un 30 por ciento para el vacuno leche, un 17 por ciento para el ovino caprino y, en conjunto, para todos los sectores ganaderos en una cifra muy próxima al 11 por ciento.

En cuanto a medidas relacionadas con la sequía, el delegado ha indicado que ya se están poniendo en marcha acciones para afrontar "la preocupante situación que está provocando la falta de agua", como la reunión del Comité de Adversidades Climáticas, del Ministerio de Agricultura, Pesca y Alimentación, en el que se evaluó la situación y "se espera que de forma muy próxima" se convoque la mesa de la sequía.