Sequías, inundaciones, plagas, accidentes... la imprevisibilidad del campo hace de los seguros agrarios un elemento indispensable en una explotación agraria y su importancia es creciente, dado que los fenómenos meteorológicos adversos son cada vez más frecuentes y virulentos a causa del cambio climático.
El seguro agrario permite paliar las pérdidas económicas de la meteorología, enfermedades o accidentes que provocan daños. Por ello, son crecientes las ayudas de la Entidad Estatal de Seguros Agrarios (Enesa) para la contratación del seguro agrario combinado, que en España coordina Agroseguro, entidad que se encarga de la gestión de los seguros de las 18 entidades aseguradoras que forman parte del pool de coaseguro. Las ayudas de Enesa son complementadas por las comunidades autónomas. En el caso de Andalucía, la Junta hizo ya entrega del segundo pago de las ayudas de la convocatoria de 2020 dirigidas a respaldar la contratación de seguros agrarios. En esta ocasión, el Gobierno andaluz ha abonado más de 2 millones de euros a un total de 645 agricultores y ganaderos de Andalucía, de los que 126 son de Córdoba, que han recibido algo más de medio millón de euros. Con esta liquidación, la Consejería de Agricultura, Ganadería y Pesca supera los 9 millones de euros ingresados en las cuentas bancarias de más de 9.000 profesionales del campo andaluz, una cantidad que supone el 86% del total del presupuesto comprometido para la convocatoria 2020 (10,5 millones de euros).
El respaldo al aseguramiento por parte del Gobierno andaluz responde a la eficacia demostrada por este instrumento para favorecer una mayor estabilidad en la producción agraria y salvaguardar las rentas de los agricultores y ganaderos al ofrecer una compensación económica ajustada a las pérdidas que pueden soportar las explotaciones, indican desde la Delegación Territorial de Agricultura, Ganadería y Pesca de Córdoba.
En los últimos años ha crecido el número de asegurados. Según indica Agroseguro en El seguro agrario en cifras 2020, en dicho año se contrataron en España 416.000 pólizas, lo que supone un crecimiento de entre el 4 y el 6% (dependiendo del sector asegurado). Sin embargo, y a pesar de las ayudas a la contratación, en Andalucía no crece el número de empresarios agrícolas que optan por contratar un seguro combinado. Según datos de Agroseguro, 2020 cerró con 2.400 pólizas menos que el 2019 en Andalucía, si bien se incrementó la producción asegurada en casi un 7% hasta cerca de los 4,6 millones de toneladas. También el valor de la producción fue mayor que en el ejercicio precedente, con cerca de 2.340 millones de euros (+7,48%).
Esta misma entidad señala que el pasado año se declararon en la provincia de Córdoba 822 siniestros agrarios. El mal cuajado, con 140 casos; el pedrisco, con 139, y la sequía y asurado no nascencia, con 114, fueron las principales causas de los siniestros. En cuanto a los siniestros pecuarios, el informe recoge que se produjeron 21.153 siniestros en la provincia, de los que 19.187, es decir, el 90,7%, fueron por riesgos y daños, seguidos por los accidentes, con 982 siniestros.
Hasta junio, Agroseguro prevé indemnizaciones por valor de 461,25 millones de euros por los siniestros producidos en España en los primeros seis meses del año, lo que supone un 22% más que en 2020. En total, han sido 930.611 hectáreas afectadas en toda España por 821.168 siniestros. Los cultivos más dañados en el primer semestre son frutales, hortalizas, uva de vinificación, cítricos, herbáceos extensivos, almendro, cereza y olivar, con un total de 380,96 millones de euros.
En el caso de Andalucía, los cítricos -a causa de las heladas asociadas a la borrasca Filomena-, y los herbáceos -por pedrisco en mayo y junio-, fueron los cultivos con más incidencias, con 15,50 y 4,24 millones en indemnizaciones respectivamente, según consta en el informe sobre la siniestralidad del ejercicio 2021 de Agroseguro.
Con respecto a las ayudas pagadas a seguros agrarios por la Junta de Andalucía en Córdoba en la convocatoria de 2021, se han beneficiado provisionalmente un total de 2.885 expedientes por un importe de 1.911.798,33 euros. Se han abonado ayudas a las primas de seguros agrarios contratados por los agricultores y ganaderos en 2020, que al referirse a años agrícolas o ganaderos pueden referirse al plan 2019 o al plan 2020. Por otra parte, son pagos a un total de 2.885 expedientes y pueden existir más de un expediente por agricultor. Se estima que cuando finalicen los pagos los beneficiarios definitivos reciban un total aproximado de 2,2 millones de euros, informa la Delegación Territorial de Agricultura, Ganadería y Pesca de Córdoba.
De los 2.885 expedientes, casi la mitad correspondieron a la cobertura de gastos derivada de la retirada y destrucción de animales muertos (1.418), seguidos por las compensaciones por pérdida de pasto (453), los seguros de herbáceos extensivos (434) y los de olivar (123).
Los productores pueden elegir entre tres modalidades del seguro agrario: sistema de seguro creciente, que en todo momento tiene todos los riesgos asegurados, pero que los niveles de cobertura van aumentando según los módulos escogidos por el agricultor; seguro tradicional, destinado a explotaciones ganaderas, y el seguro base con garantías adicionales, que tiene una opción básica, con la cobertura frente a daños catastróficos, sobre la cual el asegurado puede ir incorporando garantías adicionales en función de sus necesidades. Esta modalidad de seguro sólo está actualmente para la línea de uva vinificación en Península y Baleares.
Con relación a los riesgos cubiertos, el criterio general es cubrir los daños ocasionados por variaciones anormales de los agentes naturales, superados los medios usuales de lucha preventiva. Con carácter general, en los seguros de agricultura y fortestales se cubren el pedrisco, heladas, nieve, lluvia, inundación, viento, incendio, fauna, no nascencia, falta de cuajado, virosis, golpe de calor, ahuecado en sandía y resto de adversidades climáticas. Asimismo, en la línea de seguro para organizaciones de productores y cooperativas es asegurable el perjuicio económico que representa el hacer frente a los costes fijos de los bienes asegurables cuando se haya producido una merma de entrada de producción en la organización o cooperativa por riesgos asegurados. Para las instalaciones quedan cubiertos la totalidad de riesgos climáticos y el incendio.
En el caso de la ganadería, se cubren adversidades climáticas (incendios, inundaciones, rayos, sequía, golpe de calor, viento huracanado, lluvia torrencial, nieve, etc.), ataque de animales salvajes o perros asilvestrados, accidentes, muerte masiva, período improductivo por muerte masiva, mortalidad por diversas causas, enfermedades que incluyen las principales epizootias que afectan a cada especie, así como otras enfermedades no epizoóticas, intoxicaciones, saneamiento ganadero oficial, pérdida de pastos y gastos derivados de la retirada y destrucción de animales muertos en la explotación.
Con relación a las pólizas más contratadas en la provincia de Córdoba, desde la Delegación Territorial de Agricultura, Ganadería y Pesca de la Junta en Córdoba explican que los más destacados son, en agricultura, el seguro de herbáceos extensivos y el seguro de cítricos y, en ganadería, el seguro para la cobertura de los gastos derivados de la retirada de cadáveres de animales muertos en explotaciones ganaderas.
Respecto a las ayudas, es importante destacar que las subvenciones totales a las pólizas agrícolas y ganaderas tienen un tope de la Unión Europea del 65% de la prima comercial (común de Agroseguro más compañía) para las líneas agrícolas y ganaderas, salvo la retirada y destrucción de animales muertos en las explotación, que es el 90%. La Junta aporta un porcentaje de la subvención de Enesa de las pólizas que ha subvencionado este organismo del MAPA con un tope de 5.000€/póliza y 9.000€/NIF.
